Un espía oficial de usuarios de internet

Este rastreo implica el seguimiento de un individuo a través de audio, video, fotografías, correos electrónicos y registros de conexión.

Los medios de comunicación afirmaron que estas grandes empresas son conscientes de esta operación expiatoria, ya que es una labor que realiza el Gobierno de Estados Unidos desde 2007 como un plan contra el terrorismo.

Después de los ataques que sufrió el país norteamericano el pasado 11 de septiembre de 2001, el Gobierno decidió monitorear a gran escala las comunicaciones telefónicas y de internet de millones de ciudadanos, con el objetivo de adelantarse a posibles ataques orquestados por Al Qaeda.
La operación está a cargo de la NSA, un servicio creado durante la Guerra Fría, especializada en escuchas telefónicas.

La compañía a través de algoritmos encuentra nuevas rutas de rastreo para encontrar contactos o conspiraciones de presuntos ataques.