Los de mayor edad y experiencia se sienten subvalorados, pues consideran que saben o conocen más del oficio que sus jóvenes jefes. | Foto: Revista Dinero

Laboral

Sobreviviendo al jefe joven

Las diferencias generacionales son complicadas en todos los ambientes, en especial en el laboral. Trabajadores mayores y líderes jóvenes deben aprender a respetarse y dejar atrás los estereotipos.

11 de junio de 2014

El acelerado cambio tecnológico y la llegada de profesionales altamente capacitados y menores de 30 años, han provocado un revolcón en los organigramas empresariales. Entre los altos mandos cada vez hay más directivos menores de 40 años que lideran equipos con personas que los superan en edad.

De hecho, en Estados Unidos se calcula que 43% de los trabajadores mayores de 35 años tiene jefes más jóvenes, lo que genera grandes oportunidades por el ímpetu y las ganas de cambio de estos ejecutivos, pero también son la base de conflictos y malos entendidos.

Los de mayor edad y experiencia se sienten subvalorados, pues consideran que saben o conocen más del oficio que sus jóvenes jefes y estos, a su vez, tienden a sentirse retados por los mayores y toman malas decisiones solo para ratificar que son los que mandan.

Si usted está en alguno de los dos bandos, lea los siguientes consejos para que el trabajo no se vuelva una pesadilla y para que las diferencias generacionales no sean un obstáculo, sino una oportunidad.

Cómo tratar a los ‘pelados’


Entienda su estilo de comunicación: no se amargue si a su joven jefe solo le gusta hablarle por correo electrónico o mensaje de texto. Por el contrario, aproveche para mejorar sus habilidades con estas herramientas.

No asuma que lo van a respetar solo por su edad. Demuestre de lo que es capaz y gánese el respeto de su joven jefe.

No intente actuar de forma paternal o como mentor de su jefe. Esta es una tendencia entre los trabajadores mayores. Evítela a toda costa pues, si bien su superior es menor, ya es un adulto.

Acepte los cambios. Todo nuevo jefe –joven o mayor– trae cambios. La clave es entender que es la persona al mando y si está allí, por algo será. Reconozca que, así tenga menos años, tiene algo que enseñarle.

Paciencia con los mayores

No confunda autoridad con arrogancia: no hay necesidad de estar recordándoles a sus subalternos mayores que usted es el que manda.

No los estereotipe y no piense que, por ser mayores, se van a comportar siempre de la misma manera. Si se da la oportunidad de conocerlos, sabrá lo que tienen en común con usted.

No les limite sus oportunidades. No piense que porque son mayores no quieren capacitarse más o seguir ascendiendo.

Escuche sus opiniones e ideas, al fin de cuentas ellos llevan más tiempo en la empresa y saben perfectamente lo que no funciona y lo que da resultados.


Luis Carlos Vélez, Director de Caracol Noticias

“Lo más importante es el respeto y más si la persona tiene experiencia. Escucho sus consejos y los socializo. Otra clave para los equipos de todas las edades, es que trabajen contentos y ahí es importante darles prioridad a sus temas personales, cosa que en los medios de comunicación no se veía mucho y, por eso, es un gran cambio para los mayores”.