Las oficinas abiertas han acercado a los trabajadores.

Ambiente laboral

¿Dónde se es más productivo: en oficina abierta o cerrada?

El tipo de lugar donde el trabajador desempeñe las labores puede influenciar en su rendimiento. Sin embargo, la sabiduría popular dice que “escoba buena, barre bien en todo lado”.

5 de junio de 2012

Las oficinas abiertas son aquellas en las que las personas son vecinos “muy cercanos” porque apenas están separados por el espacio del escritorio. Ese tipo de organización ha permitido a las empresas ahorrar costos y espacio, pero para algunos tiene la consecuencia de distraer a los trabajadores.

Sin embargo, el trabajar en un espacio individual u oficina cerrada no necesariamente implica que se sea más eficiente porque la privacidad da la sensación de libertad y menor vigilancia. Entonces el trabajador cae en la tentación de distraerse en otras “tareas”.

Ventajas y desventajas de la oficina abierta

Permiten mayor interacción con los compañeros. Si se tiene alguna duda o se necesita ayuda para una tarea es más fácil la comunicación que cuando se está separado por paredes.

Adicionalmente las oficinas abiertas son motores de creatividad, porque apenas surge una idea puede ser comentada y mejorada en grupo.

Lo malo de esta clase de puesto de trabajo es que constantemente se está siendo interrumpido por los compañeros.  Tampoco se tiene privacidad al recibir llamadas o visitas porque no se tiene un puesto de escritorio que se aleje de los demás.

El ruido, la pérdida de objetos y hasta el desorden de los demás suelen ser inconvenientes para sentirse a gusto en las oficinas abiertas.  

Ventajas y desventajas de la oficina cerrada

Las principales ganancias son la privacidad y la comodidad. Compartir siempre implica aceptar  algunas condiciones de comportamiento del otro que no se pueden modificar fácilmente y en un espacio cerrado no se tendrá ese inconveniente.  

Las visitas de trabajo o personales ya no serán problema, quedarán entre usted y su visitante y nadie más. Así mismo, se sentirá menos vigilado por otros compañeros y sus jefes.

Las desventajas de trabajar encerrado es que se evita en muchas ocasiones la socialización de ideas y comentarios con sus compañeros y aunque no se quiera,  termina por imponerse el aislamiento.

No obstante, tenga en cuenta que sin importar si el trabajo desempeñado es en una u otra oficina, es el trabajador quien define su rendimiento.