Laboral

Cuatro espacios en los que “hacerse el tonto” pueden funcionar para su carrera

Ser inteligente también implica saber cuándo esconder sus habilidades cuando le es conveniente. Y aunque le puede sonar terrible, conozca las situaciones en las que no debe sacar a brillar su intelecto.

23 de junio de 2015

Si usted es de quienes se ha destacado durante toda su vida por su capacidad intelectual, buscar nuevas soluciones para los problemas, ser creativo y reaccionar rápidamente ante cualquier situación; sabe que esas cualidades no siempre le ayudan a conseguir lo que quiere.

Quizás porque en ocasiones puede ser una persona tímida y no le ve utilidad a demostrarlo, o porque no ha encontrado (o no le han brindado) el momento propicio para serlo. Pero así mismo sabe que puede crear mejores oportunidades, dependiendo de sus intereses.

Pero no siempre puede ser útil. Y sí, su reputación puede ponerse en riesgo cuando quiere aparentar no tener las capacidades, pero de acuerdo con un estudio publicado por Fortune existen estudios que demuestran cómo la estupidez puede aumentar la eficiencia, al no centrar la atención en detalles específicos.

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Así, The Muse, una página especializada en temas laborales, estableció cuatro momentos en los que puede ser más útil para su carrera profesional actuar de esa forma:

• Al llegar a un área...

Cuando ésta está en proceso de crecimiento o mejoramiento. Es casi como cuando llega nuevo a un trabajo que, lo más inteligente es escuchar, aprender y luego empezar a actuar. Puede no ser muy bien tomada una actitud propositiva, que puede verse como impositiva y pedante. Por el contrario, entre más información y detalles recolecte, así como más pregunte, más entenderá el proceso y, a su turno, cómo mejorarlo.

• En el caso de un compañero que…

Sea difícil de tratar, sea de malgenio y siempre quiera imponer su voluntad. Hay batallas en las que es bueno ceder y fingir ingenuidad puede convertirse en la mejor arma. Las propuestas que haga o los análisis que haya hecho usted puede exponerlos a esta persona y en caso de que encuentre una negativa sin fundamento alguno, sencillamente responda como si nunca antes hubiera escuchado que sería difícil o como si no comprendiera la situación, según sugiere The Muse.

Esto le puede ayudar a evitar conflictos innecesarios y confrontaciones de poderes que, si usted no es el jefe, siempre puede llevar “las de perder”. Y en dado caso que se trate de algo urgente, usted sabe que expuso lo que pensaba, así que esa carta puede usarla luego.

• Cuando no coincida

Con una decisión, un proyecto o una idea. Que le digan “es una idea terrible”, cuando proponga algo que se salga fuera de las políticas y contextos en los que siempre trabajan, hará que la otra persona tome una actitud de estar a la defensiva. The Muse sugiere que, antes de contraatacar pida una aclaración o más información al respecto, para que sea usted mismo quien conduzca la conversación.

Intente con un “no entiendo el punto, ¿podrías explicarlo de otra manera?” y esto le puede dar la ventaja para que, bajo otra perspectiva que le puede ser más conveniente.

• Políticas de la oficina

“Debo haberme perdido de eso”, aprenda esta frase –sugiere The Muse-. Esto, especialmente en las relaciones laborales en las que, por lo general, sale a relucir lo malo, absurdo o negativo que es el trabajo o la actitud de alguien.

Si puede salirse del tema rápida y diplomáticamente, sin ofender al otro, sus habilidades intelectuales pueden ser superiores a las del promedio. Pero si es de quienes dicen “prefiero hablar de otro tema”, será visto como una persona rígida o prejuiciosa.

También lea “Las peligrosas desventajas de ser muy bueno en el trabajo”.

Por qué actuar como “tonto” puede ayudarle

Según la página web Financial Samurai, existen tres grandes ventajas de no mostrar la totalidad de sus habilidades cuando no le conviene:

1) Ya no se convierte en una amenaza: Sea cual sea la industria para la que trabaja siempre encontrará a alguien que le tenga envidia y busque la forma de hacerlo caer o, peor aún, buscarán robar sus ideas. Al no destacarse, las personas dejarán de buscar socavar sus capacidades.

2) Puede sorprender con mayor facilidad a los superiores. Mantener un nivel bajo le permite ser de aquellos que pueden no prometer tanto, pero que, con la oportunidad perfecta, logren sobresalir más que todos los demás y generar un mayor impacto.

3) Va a tener una vida mucho más feliz: no tener que estar sobrellevando el peso de las expectativas y que la atención ante los problemas o retos siempre recaiga sobre usted, le quita una presión que a veces se vuelve incontrolable.

Esto también hace que el fracaso sea más llevadero y que los pequeños retos sean grandes victorias.