Ambiente Laboral

Cuándo es hora de renunciar

Si su actual situación laboral no es satisfactoria, analice estos factores cuidadosamente para determinar qué espera y exige de su próximo trabajo.

20 de junio de 2008

Muchas veces cuesta admitir que el puesto, las condiciones laborales, los compañeros de trabajo y los jefes han dejado de crear un ambiente estimulante para prosperar. Si levantarse todos los días para cumplir se le ha convertido en un tormento, Dinero le muestra 10 importantes señales que le dicen que es hora de renunciar.

Si acaba el día y está exhausto

Si trabaja más de 8 horas diarias, no sabe si hubo sol o llovió, porque cuando sale de la oficina es siempre de noche, su trabajo le está pidiendo más de lo que se requiere. Aunque a veces hay que hacer un esfuerzo adicional y trabajar más, no puede permitir que se convierta en tal desgaste físico y emocional, tanto que no tenga tiempo para usted y su familia.

Jefe pesadilla
Un mal jefe puede convertir el mejor trabajo en una pesadilla, así que hay que tener una muy buena relación con él para lograr el éxito y la felicidad profesional. Si su jefe siempre está ausente, ocupado, ensimismado o es poco confiable, no se desgaste en luchar para que lo cambien o lo echen. Es mejor buscar un nuevo trabajo con un jefe accesible y preparado.

El ambiente es nocivo
Recuerde que un mal ambiente laboral es el reflejo de la cultura organizacional de la empresa, así que analice si el ambiente es poco estimulante y enriquecedor. Si tiene baja moral todo el tiempo y se ha quejado todos los días de los dos últimos años por sus condiciones laborales, no lo piense más.

No es valorado
Es importante evaluar si la empresa reconoce al empleado sus éxitos y aciertos, pues usted debe sentirse apreciado. Analice si su empresa hace algo para recompensar sus esfuerzos, por ejemplo, si recibe algún tipo de bono o de prebendas. Si su jefe nunca ha oído el término retroalimentación positiva es hora de buscar una compañía que valore sus talentos. 

compañeros son una molestia
La gente molesta invade la vida laboral de cualquiera. Es necesario aceptar que no todos se entienden perfectamente y que para ejecutar las tareas es clave tener una relación llevadera con los compañeros. No obstante, cuando el chismoso, el quejumbroso, el controlador o el vecino se vuelven un grupo insoportable, que se mete en su vida laboral al punto de afectar su productividad y rendimiento, busque alternativas. Si no es posible un cambio o ya no se los aguanta, recuerde que no tiene que sacrificarse por nadie y busque un mejor ambiente laboral.

No lo respetan
Si su caso corresponde a alguno de los siguientes ejemplos, es evidente que está perdiendo tiempo, energía y buenas ideas en una empresa que no lo aprecia. Por ejemplo, sus ideas no son valoradas; no hay oportunidades de proyección; su jefe lo ignora; sus compañeros lo aíslan; lo pasan por alto a la hora de un ascenso… otra vez; lo excluyen de proyectos clave y de las decisiones estratégicas, es evidente que esa decisión ya se tomó por sí sola.

Mirar el reloj cada diez minutos
Está enterado de las noticias más que cualquiera, conoce todos los chismes de Hollywood y de sus amigos del colegio, de la universidad, del posgrado, y —todavía— siguen siendo las 8:30 a.m. Es agotador trabajar mucho, pero es peor no tener nada qué hacer. Aunque es normal distraerse en el trabajo, no puede hacerlo todo el día. Además, si no encuentra cómo hacer más cosas, la administración puede considerar su trabajo innecesario y despedirlo.

Sus compañeros actúan como salvajes
Si está cansado de quien le roba las ideas, del que delega todo y nunca asume la responsabilidad, del que llega tarde y se va temprano sin trabajar, o del que deja todo para lo último y le afecta sus fechas de entrega, no insista en cambiarlos. Los ambientes en donde cada uno trabaja por su lado y por sus propios intereses no fomentan el trabajo en equipo y el compañerismo. Así que anímese a buscar un ambiente mejor.

Nadie se comunica
Curiosamente, la tecnología ha acortado distancias por medio del correo electrónico, los celulares, los mensajes instantáneos y, sin embargo, usted nunca se entera a tiempo de nada. Cuando la comunicación se rompe, puede ser frustrante y perjudicial para su trabajo, puede perder un negocio o cliente importante, desconocer las fechas de entrega, o incluso ser despedido.

Se siente reprimido
¿Qué tipo de vida tiene usted? Se ha convertido en una completa dedicación al trabajo. Sí, sabemos que el salario es importante, pero la calidad de vida aún más. Si odia tener que ir a trabajar y más aún el tiempo que pasa allí, es hora de liberarse. El trabajo no debe ser un lugar que lo reprime mental, física y creativamente, tiene que ser una experiencia placentera.