Trabajo

Cómo robarle el puesto a su jefe

Diez consejos prácticos para desplazar al líder y ascender en una empresa.

5 de julio de 2012

La competencia por los altos cargos en las empresas es cada vez más reñida. Aunque el desempleo ha bajado, los buenos puestos son cada vez más escasos. Para ascender, además de una excelente preparación académica y amplia experiencia, también cuentan factores como la suerte y comportarse de manera estratégica en la oficina.

Esto no significa que tenga que dedicarse a intrigar y a conspirar para ascender –aunque puede ser útil–; más bien, que desde su ingreso a una organización proyecte una presencia ejecutiva.

Esa cualidad muestra que la persona, además de contar con una amplia formación, está dispuesta a aprender, toma decisiones rápidas, se sabe vender y tiene pinta de líder. Y esto no solo incluye la ropa.

“Si soy un jefe y debo nombrar a mi reemplazo entre los mejores ejecutivos de la firma, es lógico que no voy a elegir a quien no tiene los mejores modales en la mesa, así sea el que más sabe. Esa persona se va reunir con los clientes más importantes y será la imagen de la compañía”, dice Schneur Zalman Ben-Chaim, coach y consultor empresarial.

El experto asegura que para asumir el puesto más importante se requiere también una actitud distinta frente a la vida. No solo debe ser inteligente, sino saber administrar esa inteligencia y volverse cautivador.

“Muchas decisiones de negocios, tienen un alto componente emotivo. Se inclinan por una oferta porque la contraparte inspira confianza o hay empatía y ahí es donde se requieren esas virtudes de cautivador”, asegura Ben-Chaim.

Pero, mientras aprende a llegar a ese punto, vale la pena tener en cuenta consejos prácticos que le podrían servir para llegar a la cima o, al menos, para hacerle el cajón a su jefe.

Los 10 consejos prácticos

1| Haga amigos en las altas esferas: conozca quiénes son las personas en la organización que pueden ayudarle a ascender (los jefes de su jefe). No necesariamente para lagartearles, sino para darles sus ideas y pedirles su opinión. Si puede construir unas buenas relaciones con los altos mandos, ellos lo tendrán en cuenta a la hora de buscar reemplazos en las jefaturas.

2| Vuélvase un experto:
si sabe mucho de un tema en la empresa, no solo gana visibilidad, sino que adquiere poder. Ofrézcase para enseñar lo que sabe. Para lograrlo, escoja un tema que sea relevante en su trabajo y configure alertas de Google sobre el mismo, que le llegarán a su correo diariamente. Destine entre 15 y 20 minutos de su jornada para leerlas, aprender y estar al día.

3| Comuníquese bien:
la comunicación efectiva se refiere a involucrar a los interlocutores. Lo primero y más importante es sonreír y hacer contacto visual. Independiente de si está interactuando con supervisores o compañeros, siempre pregúnteles qué piensan sobre lo que están discutiendo y por qué. Escuche sus respuestas, pues ese es el mejor ejercicio para involucrarse con la gente.

4| Confíe en sí mismo:
muchas personas en la cotidianidad de las oficinas se olvidan de hacer propuestas porque creen que no tienen las capacidades para un puesto más alto. Hay que arriesgarse para avanzar. Igualmente, es necesario perderle el miedo al jefe, contradecirlo cuando sea necesario y siempre de buena forma, ofreciéndole alternativas. No solo hay que criticar, también es necesario ser propositivo.

5| Resuelva problemas: la mejor manera de saber cuáles son los problemas de una empresa es actuando como cliente. Use los productos o servicios de su compañía y sabrá qué necesita mejorar. En ese momento podrá promover el cambio y ganará muchos puntos.

6| Haga las cosas aburridas
: ataque los temas aburridos con gusto y con buena cara, pues como siempre, el tonito y la expresión son claves en las relaciones humanas.

7| Encante a su jefe:
sutilmente gánese su confianza siendo un empleado ejemplar. Proporciónele apoyo, pero nunca trate de eclipsarlo. Si logra convertirse en el jefe de prensa de su superior logrará que lo recomiende a usted para reemplazarlo.

8| Véndase bien: así como es clave encantar al jefe, también lo es mostrarse como un buen profesional, pues la persona que se vende bien también podrá hacer lo mismo con la empresa que representa.

9| Recuerde a Bruce Todopoderoso:
tenga claro por qué quiere ser jefe –no solo por el dinero–, para evitar que le suceda lo mismo que al actor Jim Carrey en la película de Todopoderoso cuando asumió el rol de Dios por unas horas y se dio cuenta de que no estaba hecho para el cargo y que eran mayores los problemas que las satisfacciones.

10| Nunca olvide cómo ascendió:
cuando logre su meta y reemplace a su jefe, recuerde lo que hizo para conseguirlo, pues detrás de usted vendrá otro con las mismas aspiraciones, que podría repetir su estrategia.