Recomendaciones, la forma más útil para conseguir trabajo

El informe de demanda laboral fue elaborado por la Secretaría de Desarrollo Económico de Bogotá, dentro de lo que destacó los mecanismos que las empresas usan para contratar personas para ocupar sus vacantes.

“Al indagar sobre los mecanismos usados por los establecimientos para encontrar su personal vacante, la encuesta determinó que la recomendación de personal por parte de un trabajador, un familiar, un amigo o un colega fue el principal medio empleado, puesto que seis de cada diez empresas manifestaron usarlo”, señaló el estudio.

El común

Para contratar existen mecanismos formales e informales y las recomendaciones personales pertenecen al segundo grupo. Se trata de un medio muy común debido a dos razones: una, por los menores costos, a diferencia de los que pueden cobrar las agencias laborales; dos, por oportunidad, por la falta de experiencia de los aspirantes en los sistemas de intermediación laboral de las instituciones educativas.

Además, “la recomendación de personal contiene implícitamente valores como la sinceridad, la confianza y la reputación, que buscan generar o fortalecer las relaciones laborales o sociales, según el caso”, señaló el reporte.

Esto ocurre sobre todo para las microempresas y las pequeñas empresas. Y aunque las grandes y medianas también usan este mecanismo en un 43%, confían más en prensa, radio o internet (47%).

Efectivamente, la red de relaciones cercanas es la que más le permite acceder y saber de una vacante.

Lea ¿Sin trabajo? Sus amigos pueden ser la respuesta

¿Cómo pedir una recomendación?

Una forma muy sencilla de que lo recomienden es su trabajo: un buen desempeño, ser eficaz, eficiente, una buena presentación personal y, por supuesto, buenas relaciones interpersonales.

Cuando usted cumple con estas condiciones, si está desempleado, las personas incluso lo ayudarán sin que usted pida ayuda.

Pero también está la opción de solicitar una referencia. Themuse.com hace un listado de seis trucos para saber a quién pedirlas y cómo hacerlo:

1. Anticípese: antes de postularse o de iniciar un proceso de contratación (si es el caso), realice una lista de las personas a las cuales puede solicitar su referencia o recomendación: supervisores directos, compañeros de trabajo en altos cargos, en general, personas que conozcan su trabajo.

2. Elija sabiamente: escoja a aquellas que usted considera que hablarán bien de su trabajo, destacarán sus habilidades, que sean elocuentes y puedan hablar con claridad. Si quizá no tiene o no quiere poner a su más reciente supervisor, puede buscar a compañeros de la misma empresa que vieron su desempeño.

Tenga también en cuenta el estado de la relación, debe ser una persona con quien mantenga una comunicación constante.

3. Solicítelo: Llame a cada una de estas personas y pregúnteles si estarían dispuestos a servirle como referencia, pregunte sobre la viabilidad y la disponibilidad de tiempo. No obligue a las personas a que acepten.

Si siente que están en duda o respondieron por amabilidad, pase al siguiente de la lista. Tenga en cuenta que una referencia neutral también es una mala referencia.

4. Hágalo sencillo: Una vez acepten, coméntele a qué puesto va a aplicar y en qué consiste. Tómese el tiempo para confirmar la información de contacto y los títulos o cargos actuales.

5. Pregunte si es necesario: recuerde que hoy en día las empresas no requieren ni solicitan siempre referencias y, en cambio, podrá ser considerado como un factor distractor o, incluso, en su contra. Así, confirme con su entrevistador si son necesarias.

6. Haga seguimiento: demuestre agradecimiento a las personas que le ayudaron y asegúrese de hacerles saber, de inmediato, cada vez que aplique a un nuevo trabajo.

Recuerde que el truco es mantener buenas relaciones y siempre estar agradecido con los demás.