Home

La cifra

Artículo

Para defenderse de la publicidad engañosa, hay que empezar con el momento de la compra.

Ojo con la publicidad engañosa

Guarde siempre la factura de compra por un tiempo considerable. Éste es el documento que le permitirá reclamar por un producto defectuoso o por un plan adquirido y luego modificado. Si no le solucionan el problema, acuda a los entes de control.

18 de enero de 2010

¿Ha sido víctima alguna vez de publicidad engañosa? ¿Compró un artículo que según la publicidad que vio, costaba una suma y cuando llegó a la caja valía el doble? ¿Firmó un plan de celular que resultó siendo totalmente distinto al que usted creía? Usted tiene derechos al respecto que puede hacer valer frente a la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC).

La publicidad engañosa se manifiesta cuando “el mensaje que difunde un anunciante para dar a conocer a su marca, su producto o su servicio, o para persuadirlos en su decisión de compra, contiene elementos que son susceptibles de generar en los receptores del mismo, un concepto equivocado de la realidad o del producto que se anuncia”, señalan las normas de la SIC.

Es decir que la publicidad es engañosa cuando le atribuya características y propiedades que no contenga realmente el producto, o cuando el fin para el cual fue fabricado no es el que se menciona en la campaña publicitaria, o cuando el peso no corresponde al anunciado.

También, en el caso de la telefonía celular, cuando en la letra pequeña se incorporan salvedades al servicio que anteriormente se había pactado. Por ejemplo proponer la prestación de telefonía con tarifa fija durante las 24 horas y luego recortarla a unos minutos determinados, etc.

Para defenderse de la publicidad engañosa, hay que empezar con el momento de la compra. Solicítele al vendedor que le suministre la información del producto. No permita que le den explicaciones confusas. Aclare absolutamente todas las dudas antes de proceder a hacer la compra. El vendedor se puede escudar en el argumento que usted, el cliente, interpretó la información erróneamente.

Adicionalmente si ya fue adquirido el artículo y éste salió defectuoso o con las características equivocadas, usted debe visitar en primera instancia al vendedor y al almacén para hacerles el reclamo. Si no se le da solución usted puede asistir a las siguientes autoridades:
· Defensor del Consumidor.
· Superintendencia de Industria y Comercio. Oficina del Consumidor.
· Jueces civiles, si el daño causado amerita garantía o indemnización personal.
· Y en último caso, solamente si considera que se produjo el delito de estafa, a la Fiscalía General de la Nación.

Para un reclamo en cualquiera de estos lugares es necesario y de suma importancia que conserve las facturas de compra de todos los productos que adquiere. Sin ellas se torna difícil conseguir que se honren las garantías, porque la factura es casi siempre la mejor prueba de que el artículo le fue vendido en un almacén específico.

Estrategias comerciales
Promociones, rebajas, descuentos. Generalmente estas son las estrategias de mercadeo que implementan el comercio y las grandes superficies para atraer compradores, máxime cuando se entra en un periodo, como el mes de enero, en el cual el volumen de ventas es reducido.

Sin duda vale la pena aprovechar los descuentos, pero hay que estar atentos a que lo que se ofrezca sea verdad. Este atento, lea cuidadosamente lo que le están prometiendo incluso la letra pequeña. Es allí donde están la mayoría de las veces el párrafo que después le traerá dolores de cabeza.