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Jóvenes: aprendan a rendir su dinero

Ahorrar, gastar, compartir e invertir son los dilemas a los que se enfrentaran las nuevas generaciones en su edad adulta. Una experta le cuenta a finanzas como hacerlo eficientemente.

Gustavo Adolfo Cabrera Cárdenas
3 de abril de 2008

Por: Gustavo Adolfo Cabrera Cárdenas
 

Una forma de administrar el dinero, es un “Comportamiento Económico”; y éste es aprendido especialmente en la familia. El tener o no riqueza, el lograr tener ingresos pasivos, y alcanzar la libertad financiera, tiene más relación con la manera como manejamos el dinero que con la forma como lo ganamos.

Cuando los Comportamientos Económicos relacionados con administrar el dinero, nos acercan a la Cultura de Prosperidad, nos ayudan a:  mantener e incrementar nuestra riqueza, disfrutarla y compartirla y facilitar que otras personas también lo hagan.

Diariamente elegimos nuestros Comportamientos Económicos y tomamos decisiones acerca de cómo obtener dinero y cómo administrarlo o utilizarlo. En este artículo me centraré en el comportamiento económico de los niños para administrar el dinero y cómo los adultos podemos enseñarles a administrarlo de tal manera que incrementen su patrimonio, brinden bienestar y mejoren su calidad de vida y la de su familia, desde la Cultura de Prosperidad.


¿Cuáles son las formas en que los niños y niñas manejan o administran el dinero?:


1.Gastarlo: Utilizar el dinero para comprar algo que satisface una necesidad o un deseo.


2.Ahorrarlo: Guardar parte del dinero ganado, hasta reunir una determinada cantidad, la cual se utilizará para lograr un objetivo deseado y concreto. Ejemplo: Cada mes ahorrar cierta cantidad, hasta tener el dinero suficiente para comprar un televisor y cancelarlo en su totalidad.


3.Invertirlo: Es pagarse a sí mismo. Utilizar parte del dinero ganado, para incrementar el capital o riqueza que se posee o generar ingresos pasivos.


4.Compartirlo: Es utilizar parte del dinero ganado, en una causa con la cual el niño se solidarice con otras personas y las ayude.


Lo primero al enseñar al niño a administrar su dinero, es que aprenda a distribuirlo en estas cuatro categorías, de tal manera que ubique físicamente el dinero que posee en cuatro sobres, frascos, cajas, etc., marcados con estas categorías: INVERTIR - AHORRAR - COMPARTIR - GASTAR.
Es importante explicar al niño qué significa cada una de estas categorías (comportamientos económicos) y la razón por la cual es importante distribuir el dinero en ellas.


Qué cantidad colocar en cada categoría depende de cada persona. Sin embargo, muchos autores recomiendan que en la categoría de invertir se coloque mínimo el 10% del dinero que se recibe. Si consideramos que en este momento el niño no tiene unos gastos urgentes, podemos enseñarle a que distribuya por igual el dinero: 25% para cada comportamiento. Así, si el niño recibe semanalmente $10.000,00, puede distribuir $2.500,00 en cada sobre.


Una vez que el niño o niña adquiere este hábito, podemos brindarle una formación financiera buscando que estos comportamientos económicos los acerquen a la Cultura de prosperidad.


1.Gastar dinero:

Un gasto es todo egreso de dinero, usado para pagar la compra de bienes o servicios. Aprender a gastar adecuadamente, significa saber consumir de manera inteligente, lo cual implica aprender a comprar “bueno, bonito y barato”, así como aprender a cuidar, tratar bien o mantener los recursos que se poseen. Para lograrlo, los niños y niñas requieren aprender a:

a) Diferenciar entre necesidades y deseos: Explique en forma sencilla que una necesidad es algo importante para la persona y le permite vivir mientras que un deseo es algo secundario y no pasa nada si no se consigue. Recuerde que las necesidades de los niños son diferentes de las de los adultos. Por ej. Para un niño un juguete es una necesidad, para un adulto, no.


b) Aplazar las gratificaciones: El no recibir lo que desean de manera inmediata, les enseña a los(as) niños(as) a ser más resistentes a la frustración, a aprender a esperar y a ser pacientes.


c) Comparar los precios de lo que desea adquirir, en distintos lugares, para comprar en el lugar en que le vendan a un mejor precio o en el lugar donde haya promociones. Esto se llama hacer compras comparadas.

d) Reducir los gastos innecesarios. A veces los niños se encaprichan con un juguete y cuando lo adquieren, lo dejan a un lado sin usarlo: Fue un gasto innecesario. Esperar unos días antes de comprar algo que desean, puede ayudarles a racionalizar sus compras, al igual que ayudarlos a reflexionar. Por ej. “Si gastas tu dinero en comprar este juguete, ya no tendrás dinero para comprar el balón que tanto deseas: ¿Qué prefieres: Este juguete o el balón?”

e) Aprender a hacer presupuestos sencillos para calcular cuánto gasta, en qué gasta y comparar esa cantidad con el dinero que recibe. Antes de que los niños reciban dinero, es importante enseñarles a planear cómo piensan utilizar el dinero que van a ganar (sean ingresos activos o pasivos).

 Esto es hacer un presupuesto. Hacer un presupuesto es registrar de manera detallada, durante un período de tiempo específico, todos los ingresos que se reciben y la manera como se utilizan. Enseñarles a los niños a hacer un presupuesto para que administren su dinero les motivará a ahorrar y les creará la disciplina de organizar y controlar sus finanzas, pues les permitirá darse cuenta qué hacen con su dinero, les enseñará a no gastar más de lo que tienen y a encontrar nuevas maneras de utilizar el dinero para incrementar su riqueza.

f) Hacer un análisis de costos (desventajas) y beneficios (ventajas) de cualquier gasto que vaya a hacer, y

g) Analizar los avisos publicitarios, con “ojos de consumidor inteligente”. Enseñe a los niños que los avisos publicitarios tienen como fin “vender” y anímelos a que se pregunten si lo que ofrecen, es para ellos una necesidad o un deseo.


2.Ahorrar dinero:

Ahorrar significa reservar una parte de los ingresos para utilizarla en el futuro en un propósito específico. Esto implica que los niños tengan una meta clara de lo que desean, antes de comenzar a ahorrar para alcanzar esa meta. Es importante que los niños comprendan que ahorrar es diferente de guardar o atesorar el dinero sin darle uso alguno.

Para los niños muy pequeños, las primeras metas de ahorro no deben ser muy altas (en cuanto el valor del artículo), ni muy lejanas (pues los niños no manejan aún el concepto de tiempo). Deben ser metas que puedan alcanzar pronto y vivan así los beneficios del ahorro.


Cuando los niños comienzan a ahorrar pueden abrir una cuenta de ahorros, indagando siempre por las ventajas y desventajas de la misma, de tal manera que no pierda su dinero por los costos de tenerlo en dicha cuenta. Si la institución financiera no cobra el manejo de una tarjeta débito, ni cobra por servicios como por ejemplo, dar el saldo, y además la cuenta está exenta del gravamen a los movimientos financieros (4 X 1000), el niño puede ver cómo aumenta su dinero debido a los rendimientos financieros. Es un momento propicio para enseñarles acerca de los intereses y de los intereses compuestos.


Puede enseñarles a los niños y niñas a buscar alternativas a las cuentas de ahorro, ya que los rendimientos financieros que éstas dan, actualmente son muy bajos. En todas las alternativas, enseñe a los niños la importancia de tener presente los criterios de seguridad, rentabilidad y liquidez, que se explican más adelante.


3.Invertir dinero:
Invertir es destinar parte del dinero que se recibe para “pagarse a sí mismo”, poniéndolo a trabajar para uno. La riqueza se logra cuando usted hace que el dinero trabaje para usted y no Usted para el dinero. Esto significa que al invertir se busca que el dinero invertido, le dé más dinero, en otras palabras que al invertir obtenga de su inversión ingresos pasivos.


Es importante que los niños tengan claros algunos conceptos cuando van a realizar inversiones: Los tres primeros términos con los que debe familiarizarse, son: Seguridad, Rentabilidad y Liquidez.


La seguridad hace referencia al riesgo que corre su dinero al colocarlo en determinada inversión. Cuando el riesgo de perder el dinero es bajo, se dice que hay mayor seguridad. Al analizar la seguridad de una inversión, es importante que los niños o niñas tengan en cuenta los riesgos, tanto de las inversiones en sí mismas como su propia tolerancia al riesgo. Toda inversión tiene riesgos y toda persona tiene un nivel de tolerancia al riesgo: Hay personas que son muy conservadoras a la hora de invertir y esto es importante tenerlo en cuenta y respetarlo. Enséñeles a diversificar sus inversiones, para que “no coloquen todos los huevos en el mismo canasto”.


La rentabilidad se refiere a qué tanto va a crecer nuestro dinero al invertirlo de una manera determinada. Por ejemplo. Tenemos $1.000 y los invertimos en X lugar. Al cabo del año tenemos $1.400. Decimos que ganamos $400 (ganancia o utilidad) y tuvimos una rentabilidad del 40%. Nuestro dinero creció 40%.


La liquidez, se refiere a la disponibilidad que tiene el dinero. Si usted hace una inversión en una cuenta de ahorros, allí puede retirar su dinero en el momento en que lo desee, es decir esa inversión tiene mayor liquidez. Mientras que si coloca el dinero en un CDT a 6 meses, no puede disponer de ese dinero antes, o puede tenerlo, pero recibiendo menos de lo que ganaría si espera los 6 meses.


Al hacer una inversión, es importante enseñar al niño a preguntarse: ¿Es segura?, ¿Qué tan rentable es? ¿En qué tiempo nuestro dinero tiene liquidez? Y a elegir las inversiones teniendo en cuenta estos criterios.


Enseñe a los niños que al invertir, van a lograr tener un capital el cual es intocable y sólo deben usarlo para comprar activos que generen ingresos (un activo es aquello que te pone dinero en el bolsillo). Deben aprender a “reinvertir” los ingresos ganados con su inversión, para que realmente el dinero esté trabajando para ellos.

 Asimismo, Enseñe a los niños a conservar los activos de la familia (los que los padres han conseguido, las herencias familiares). Uno de los aprendizajes más importantes que pueden lograr los niños es aprender a conservar e incrementar el patrimonio familiar.

4.Compartir dinero:
El papel del dinero es facilitar la vida de las personas, servirles para que adquieran lo que necesiten y mejoren su nivel de vida. Para lograr esto, el dinero, al igual que el aire, el agua y el viento, debe fluir, circular, estar en marcha. Compartir, es una forma de hacer circular el dinero, de aprender a no apegarse, ni tener ataduras que impidan prosperar. Dar y recibir, son dos caras de una misma moneda. Cuando se da y se recibe, algo circula y todos nos beneficiamos de ello.


Es importante aprender a dar. No dar por dar, sino saber hacerlo. Algunos criterios para dar, los propone Luis Enrique Pachón, en su libro Cómo construir su riqueza económica. Veámoslos:


- Dar de aquello que queremos recibir.
- Dar sin hacer alarde.
- Dar de lo que se tiene, más que de lo que sobra.
- Dar sin esperar recompensa, ni interés personal.
- Dar con generosidad, amor y alegría, disfrutando del placer de quien recibe.
- Bendecir lo que damos.
- Dar más de lo que esperan de nosotros.
- Darnos a nosotros mismos: Nuestro tiempo, nuestra presencia, nuestra experiencia y conocimientos, nuestro consejo, nuestro servicio.


Enseñar a los niños estos 4 comportamientos económicos, asegura que aprenderán a manejar adecuadamente su dinero y llegarán a ser adultos financieramente responsables.
Algunas actividades para que usted enseñe a los niños a administrar adecuadamente el dinero, son:

* Cuando el niño desee comprar algo, es importante pedirle que analice si eso que quiere es una necesidad o un deseo.


* Salir de compras con los niños, es una oportunidad para enseñarles a aplazar gratificaciones: A) En ocasiones, si piden algo que no está presupuestado comprar. Es importante decirles “no”; si ellos aceptan el “no” fácilmente, quiere decir que han aprendido a aplazar sus gratificaciones y están comprendiendo que no necesitan comprar todo lo que ven y les atrae.

Si ellos hacen un berrinche para que les compremos lo que quieren, la actitud más adecuada es mantenernos firmes y no comprarles el artículo motivo de su berrinche. B) En otras ocasiones podemos decirles antes de salir: “Hoy no vamos a comprar nada, sólo vamos a mirar y divertirnos”, C) Otras veces podemos decirles: “¿Qué necesitas comprar? Hoy vamos a comprar una sola cosa para ti. Piensa bien que quieres y antes de salir nos lo dices”; D) En otras oportunidades podemos decirles: “Hoy vamos a comprar una cosa para toda la familia. ¿Qué podemos comprar?” Lleguen a un acuerdo entre todos.


* Además de ahorrar dinero, los niños pueden ahorrar otros recursos como: El agua, la luz, el teléfono, etc. Este tipo de ahorro, además del impacto que puede tener a nivel económico, genera un impacto positivo en el medio ambiente. Pregunte a los niños y niñas qué recursos pueden ahorrar en la casa y cómo hacerlo. Lleve a cabo algunas de sus ideas.


* Con los niños pequeños, hable sobre el ahorro en términos de coleccionar. Para los niños en edad preescolar, los cuales son muy visuales, proporcióneles una alcancía o frasco transparente irrompible para sus ahorros, donde puedan ver cómo su dinero aumenta a medida que ponen más en la alcancía. Pegue en la alcancía o en el sobre, un dibujo del artículo para el cual los niños o niñas están ahorrando, Esto les ayudará a tener presente el propósito del ahorro.


* Busque distintas formas de invertir y explíquelas a los niños. Si va a invertir en algo que no conoce, estudie y dé ejemplo a los niños de algo que hace un buen inversionista: Capacitarse en temas de inversión.


* En épocas especiales del año, invite a los niños a compartir el dinero que han colocado en esa categoría. Hagan de ese momento algo especial y disfruten ver cómo lo reciben las personas elegidas.

 

Por  María Inés Sarmiento
-Autora del libro “Cómo facilitar el despertar financiero en los niños y niñas” Editorial El Manual Moderno.
- Autora: Colección de seis módulos dirigidos a padres y docentes sobre “Formación Financiera para niños” En: www.minidocs.es
- E-mail: misdpg@yahoo.com

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