| Foto: María Inés Sarmiento

Eduque a sus hijos sobre prosperidad

La sicóloga Maria Inés Sarmiento Díaz explica cómo enseñar a los niños una cultura de prosperidad. Segunda parte del especial para padres “cómo abordar temas financieros con sus hijos”.

María Inés Sarmiento
23 de enero de 2008

En el artículo anterior, ¿Cómo abordar una formación financiera con los niños y niñas?, expliqué lo que significa una Cultura de Pobreza y una Cultura de Prosperidad. Recordemos:

La Cultura de Pobreza, hace referencia a mantener un sentimiento duradero y profundo de escasez que genera angustia, temor, inseguridad. También es un proceso que implica: a) No darse cuenta de los recursos que se poseen; b) Mantener una actitud negativa hacia la vida y hacia lo que posee, la cual lleva a la persona a quejarse, criticar, envidiar, culpar a los demás de su situación y pensar que no tiene control sobre la misma, y c) Manejar inadecuadamente los recursos (pocos o muchos) que se poseen, entre ellos, el dinero.

La Cultura de Prosperidad, es un sentimiento duradero y profundo de abundancia, que genera paz, tranquilidad, seguridad y felicidad. También es un proceso que implica: a) Ser consciente de los recursos que se poseen, b) Mantener una actitud positiva hacia la vida y hacia lo que posee, la cual permite a la persona disfrutar lo que tiene, sentir abundancia y seguridad en sí misma y en el entorno y c) Saber manejar los recursos (pocos o muchos) que se poseen, entre ellos el dinero.

También comentaba que para que una educación financiera dirigida a los niños y niñas sea sólida, requiere comenzar con enseñarles a desarrollar una Cultura de Prosperidad con la cual generen y administren adecuadamente el dinero y sobre la cual construyan su riqueza material .

Hacerlo, implica facilitar que los niños y niñas se den cuenta de los recursos que poseen, aprendan a disfrutarlos y a manejarlos adecuadamente y mantengan una actitud positiva y optimista frente a sí mismos, a los demás y a sus circunstancias. Implica también, enseñarles a asumir la responsabilidad por lo que piensan, sienten y por sus comportamientos, ayudarles a enfrentar adecuadamente los cambios y especialmente enseñarles a gozar con la prosperidad de otras personas.

El primer paso para enseñar una Cultura de Prosperidad a los niños y niñas, es vivir nosotros como adultos, una Cultura de Prosperidad, pues sólo damos de aquello que tenemos: Si tenemos Cultura de Prosperidad enseñaremos esto, mientras que si tenemos una Cultura de Pobreza, esto es lo que los niños y niñas, nos aprenderán.

En el presente artículo quiero responder a una pregunta que me han hecho varias personas: ¿En la práctica, qué actividades podemos realizar con los(as) niños(as) para enseñarles a que tengan una Cultura de Prosperidad?
Respondo a esta pregunta, proponiendo algunas actividades que guíen a los niños y niñas en este propósito: Desarrollar una Cultura de Prosperidad.

1. Actividades para que los niños y niñas sean conscientes de los recursos que poseen:
- Como padre o docente, dígale frecuentemente al niño(a) las cualidades que usted observa en el(la) (eres inteligente, honesto(a), amigable, etc.); las habilidades y talentos que manifiesta (eres muy bueno(a) tocando la flauta, juegas fútbol muy bien, etc.); resalte los objetos que posee y que puede compartir (invita a tu amigo a jugar con tu nuevo balón. Verás cómo pasas una tarde agradable).
- Pregúntele al niño(a) cómo es él (o ella) y escriba todas las características que mencione. Para aquellas características positivas, pídale que mencione un comportamiento que pueda tener para mantener esa característica y para que otras personas se den cuenta de ella. Para las características negativas, pídale que diga un comportamiento que puede tener, para cambiar y convertir esa característica negativa en una fortaleza.
- Todos los días, busque un momento con el(la) niño(a), para dar gracias por todas las cosas buenas que cada uno ha recibido (familia, amigos, estudio, alimento, vivienda, juguetes, etc.)

2. Actividades para que los niños y niñas mantengan una actitud positiva hacia la vida y hacia lo que poseen:
- Cuando el niño o niña se queje por alguna situación, pregúntele qué puede aprender de dicha situación y explíquele que todas las cosas que nos pasan, están ahí para enseñarnos algo. Busque activamente con el(la) niño(a), qué le puede estar enseñando esa situación.
- Muéstrele al niño un vaso lleno de agua hasta la mitad y cuéntele que algunas personas piensan que el vaso está medio lleno, y que otras personas piensan que está medio vacío. Pregunte al niño, cómo está el vaso para él. Sin juzgar su respuesta, comente que cuando una persona dice que está medio vacío, se está centrando en lo que hace falta, en lo que no tiene, mientras que una persona que dice que el vaso está medio lleno, se está centrando en la cantidad de agua que todavía tiene, en lo que posee. Enséñele que las personas que se centran en lo que tienen, atraen más cosas para tener y más riqueza, mientras que quienes se centran en lo que no tienen, atraen que lo que tienen se les acabe y más pobreza.
- Pregúntele al niño(a) qué cosas posee el(lla) como persona y como miembro de una familia. Hagan una lista. Si el(la) niño(a) es muy pequeño(a), usted escriba por él(lla). Añada cada día, algo más a la lista.

3. Actividades para que los niños y niñas manejen adecuadamente los recursos que poseen:
- Cada vez que el(la) niño(a) reciba un juguete nuevo, enséñele: cómo y dónde guardarlo, cómo limpiarlo si se ensucia, cómo utilizarlo adecuadamente, qué hacer para que el juguete le dure más y para mantenerlo en buen estado.
- Enseñe al niño(a) a ahorrar diferentes cosas. Por ejemplo, el agua cerrando la llave cuando no la está usando, o la luz apagando el bombillo cuando sale del cuarto donde está, o el dinero utilizando una alcancía para echarlo allí, etc.
- Enséñele al niño(a) a cuidar su cuerpo (comiendo y durmiendo bien), a mantener su habitación y su ropa ordenada, al igual que a colaborar para mantener limpia su casa. Por ej. arrojando la basura en la caneca y no en el piso, etc.


4. Actividades para que los niños y niñas asuman responsabilidad por lo que piensan, sienten y por sus comportamientos:
- Enséñele al niño(a) a que cada vez que exprese una opinión, un sentimiento o hable sobre un comportamiento que haya tenido, lo haga desde el “Yo”: “Yo pienso…”, “Yo me siento…”, “Yo hice…”
- Cuando el(la) niño(a) le “eche la culpa” a otra persona por sus pensamientos, sentimientos o actos, por ej. “Él me saca la piedra”, dígale suavemente, alguna frase para que el niño asuma su responsabilidad. Por ejemplo, “nadie le saca la piedra a nadie, tú decidiste sentirte bravo por algo que hizo otra persona”.
- Enseñe al niño(a) a que cuando exprese sus pensamientos, sentimientos y actos, lo haga en singular (Me siento, quiero, hice), en lugar de hablar en plural (nos sentimos, queremos, hicimos).

5. Actividades para que los niños y niñas enfrenten adecuadamente los cambios:
- Cambie frecuentemente la disposición de los muebles en su habitación y en la del (la) niño(a) y comente que es muy rico cambiar.
- Si el niño o niña es pequeño(a), cuando lo(la) cambie de pañal, diga en voz alta: “Te voy a cambiar de pañal. Se siente rico cambiar y pasar de estar mojado(a) a estar sequito(a)”.
- Juegue a “Cosas que podemos cambiar” y anime al niño(a) a dar muchas ideas. Igual, hágalo usted! Por ejemplo, “voy a cambiar la ruta para ir a la casa de los abuelitos”, o “puedo cambiar el lugar donde me siento en el bus del colegio”, etc.

6. Actividades para que los niños y niñas gocen con la prosperidad de otras personas:
- Busque todos los días un momento para encontrar cualidades de otras personas: De sus padres, hermanos(as), amigos(as), de las personas que no le caen bien, etc.
- Jueguen a “adivinar” qué necesitan otras personas (padres, profesores, hermanos, amigos, abuelitos, etc.) para estar más contentos y busque con los niños, distintas maneras de dar a esas personas lo que “adivinaron”. Por ej. Adivinemos: ¿Qué necesita mamá para estar más contenta? (Que le ayudemos, que le obedezcamos, que no peleemos, etc.) Hagamos algo de esto para que mamá esté más contenta. Por ej. mañana, vamos a ayudarle a arreglar la casa y concreten cómo lo van a hacer.
- Narre a los niños cuentos, poesías, fábulas, historias donde los personajes principales, sean prósperos (sean agradecidos, tengan actitudes positivas frente a las situaciones y disfruten lo que poseen). Compare esos personajes y/o personas reales, con personajes no prósperos.

Las anteriores, son sugerencias de actividades que usted puede llevar a cabo con los niños y niñas, para que vivan una cultura de prosperidad. Sea creativo e idéese otras actividades o juegos que permitan a los(as) niños(as) ser cada día más prósperos(as).

Es importante tener presente, que entre más personas prósperas existan en una comunidad, más próspera será dicha comunidad.

[1]Autora del libro “Cómo facilitar el despertar financiero en los niños y niñas” Bogotá: Editorial El Manual Moderno.

Autora: Colección de seis módulos dirigidos a padres y docentes sobre “Formación Financiera para niños”E-mail: misdpg@yahoo.com

 
[2]SARMIENTO DÍAZ, María Inés. Pautas para facilitar una formación financiera a niños y niñas.