¿Se queja su marido sobre su horario de trabajo?

El número de mujeres que hacen parte de la fuerza laboral aumenta día tras día. Sin embargo, parece que la sociedad todavía no ha podido adaptarse al cambio de los roles sociales femeninos. Los roles sexuales tradicionales del hombre que trabaja y la mujer que cuida los niños se confunden cuando las dos personas trabajan y llegan a la casa exhaustas.

Los hombres siguen esperando de su pareja más de lo que físicamente pueden entregar. Es por esto que de manera irónica, cuando las mujeres ascienden en su trabajo, se declaran muy satisfechas en lo profesional, pero muy insatisfechas en cuanto a los sacrificios requeridos para conseguir el éxito.

Los mitos continúan atormentando a las mujeres trabajadoras sobre su papel en el trabajo y en la casa. Estos mitos ocasionan a las mujeres sentimientos de culpa, difíciles de sobrellevar, que incluso las presionan a tomar decisiones que un hombre no tendría que tomar.

Los mitos

La familia es asunto de mujeres y el trabajo asunto de hombres. Este mito es opresivo, porque supone que las mujeres están menos interesadas en sus carreras que los hombres y los hombres menos interesados en sus familias.

Las mamás jóvenes deben quedarse en la casa y cuidar a los niños. Esa es una mentira dañina. La mayoría de las mujeres trabajan para sostener a sus familias y su ingreso es tan importante como el de los hombres.

Los padres no están tan interesados en sus familias como en sus carreras. Los hombres sufren calladamente su falta de compromiso con la vida familiar y en muchos casos, a medida que envejecen se vuelve más difícil reconocer su culpa originada del distanciamiento con sus seres queridos.

Una frase de negocio dice que ningún hombre ha dicho en su lecho de muerte que hubiera deseado haber pasado más tiempo en la oficina. Cuando un hombre tiene una pesada carga de trabajo y trabajo horas extras, la familia sufre, el padre sufre, el matrimonio sufre.

¿Qué tan buena malabarista es usted?

Las mamás que trabajan aun sufren por una vida desequilibrada: de ellas se espera que se sean madres y esposas, cuiden el hogar, se queden en la casa si los niños se enferman, los guíen en actividades después del colegio, sean anfitrionas para su esposo, y al mismo tiempo sen buenas trabajadoras.

La presión puede volverse insoportable. He aquí una prueba que le dirá cuan buena malabarista es usted, equilibrando la carga del hogar y el trabajo. Conteste sinceramente y después muéstrele el resultado a su marido. Decida qué respuesta le da cada pregunta Nunca o no = 1 En ocasiones = 2 A menudo = 3 Siempre o si =4

1. ¿Ha aplazado el aprendizaje de algo nuevo porque el trabajo no le deja suficiente tiempo?

2. ¿Se siente culpable por no estar el tiempo suficiente con sus hijos?

3. Cuándo su niño se enferma, ¿se siente culpable por dejarlo en la casa con otra persona?

4. ¿Se ausenta a comidas sin sus hijos?

5. ¿Hay algún problema en su casa como peleas con su esposo, adolescentes en problemas, estrechez financiera, que la distraen en el trabajo?

6. ¿Hay problemas con el colegio de sus hijos o con la persona que los cuida, que le preocupan?

7. ¿Se siente deprimida o aburrida cuando no esta trabajando?

8. ¿Trabaja durante los fines de semana, puentes o vacaciones?

9. ¿Quiere tomar vacaciones pero no ha tenido tiempo en el último año?

10. Cuándo sale a vacaciones ¿piensa en el trabajo?

11. ¿Los viajes relacionados con su trabajo le crean problemas en la casa?

12. ¿Las tareas del hogar están desbalanceadas y divididas de acuerdo a los roles sexuales tradicionales?

13. ¿Con qué frecuencia cancela planes con su familia a causa del trabajo?

14. ¿Desearía tener un trabajo diferente que le permitiera pasar más tiempo con su familia?

15. ¿Ha faltado al cumpleaños de algún hijo, u otro evento importante como el aniversario de sus padres, en los dos últimos años a causa del trabajo?

16. ¿Extraña hacer ejercicio o algún deporte que hacía antes?

17. ¿Siente que no tiene suficiente tiempo para usted?

Qué significa su puntaje

Si su puntaje esta entre 18 y 27, usted ha aprendido a balancear las demandas del hogar, el trabajo y su vida personal. Si su puntaje está entre 28 y 54, algo está fuera de control. Tal vez usted está demasiado absorta en su trabajo, o sus niños y su marido requieren mas tiempo con usted. Si su puntaje esta por encima de 55, su vida esta peligrosamente desequilibrada, y si esto continúa pueden sufrir su salud y su trabajo.

Recomendaciones

Todos los días las mujeres que trabajan hacen un trueque entre diferentes aspectos de sus vidas y la energía que necesitan para terminar cada jornada. Son muchas las que se han dicho a sí misma “el salario me permitirá darle a mi hijo una mejor educación, una vida mejor” y se han visto en la encrucijada común de “o trabajo y le doy todo a mis hijos aunque sacrifique tiempo con ellos, o no lo hago y comparto más con los niños pero dependiendo de los recursos de mi marido ”.

Para ajustarse y arreglar sus trueques eche una larga mirada a su vida y decida cuáles son las prioridades que requieren mayor atención. Elimine los sentimientos de culpa. Las mujeres tienen que ganarse la vida como los hombres. Recuerde que aunque siempre será querida en su hogar sea la condición que tenga en el hogar, una mujer que trabaja es más respetada por su marido y por sus hijos.

- Déles a sus niños pequeños atención completa cuando llegue a la casa del trabajo. Deje su mal humor en la oficina.

- Haga que sus niños la llamen cuando lleguen del colegio a la casa y llámelos usted con frecuencia pero no trate de mediar en sus problemas por teléfono.

- Aliente a sus hijos adolescentes para que tengan actividades extracurriculares, aunque hay que tener cuidado con señales como bajas notas o malos amigos.

- Haga tiempo para estar a solas con su esposo. Acueste temprano a los niños.

- Anime a su esposo a que ayude más en la casa, después de todo, los niños tienen dos padres y ambos tienen que ayudar en las actividades relacionados con los hijos.