Ponga en practica los consejos, mejore sus habilidades de comunicación y coseche los resultados en su vida personal y profesional. Foto. Corbis. | Foto: Corbis

Comunicación

Lo que no se debe hacer con el cuerpo

El lenguaje corporal es clave para expresar lo que se piensa, sin necesariamente decirlo. Sin embargo, este puede jugar del otro bando cuando no se sabe controlar en determinada situación.

9 de noviembre de 2013

Como bien dice el dicho “un gesto vale más que mil palabras”, y sí esto es totalmente aplicable a la vida cotidiana, ya que, todo gesto físico que realiza una persona, puede ser interpretado subconscientemente por lo demás.

Este acto puede llegar a darle puntos en contra y a favor, dependiendo del control que tenga sobre sí mismo y en función de la comunicación no verbal que transmita.

Controlar los gestos no es fácil, ya que éstos no son más que un reflejo de lo que mentalmente está pensando. Sin embargo, es importante tener en cuenta algunos aspectos, para evitar apuros.

Shawai Funken, experta en capacitación gerencial da algunos consejos de lo que NO hay que hacer, para no quedar “mal parado”:

1. Objetos mal puestos.
Poner cosas (taza de café, el bolso, una carpeta, un abrigo…) delante suyo puede indicar timidez y resistencia, pues desde lejos se pensaría que se está ocultando detrás de ellos.

2. Ansiedad con la hora. El estar mirando constantemente el reloj o su celular para consultar la hora, es una evidente muestra de aburrimiento.

3. Mirada en pique. Buscar qué hacer mientras le hablan o fijar la mirada hacia abajo, son una mala señal; la persona que lo acompaña puede asumir que usted no está aprobando sus ideas, que se siente incómodo o un símbolo de arrogancia.

4. Acariciar la barbilla.
Este gesto indica un juicio de por medio. Generalmente cuando alguien acaricia su barbilla es porque está en un proceso de toma de decisiones.

5. Sonrisa fingida. Fingir este gesto, puede ser una señal de engaño. Ésta puede ser identificada cuando sólo la boca y los labios actúan.

6. Cruce de brazos. Además de ser un signo de resistencia defensiva, puede interpretarse como egoísmo. Siempre hay que tratar de mantener los brazos abiertos y en los costados.

7. Hombros encorvados. Se resume en una baja autoestima. Es importante que dirija sus hombros hacia atrás, esto no sólo representará más confianza, sino que lo hará sentir más seguro.

8. Sostén para la cabeza. Sostener la cabeza con las manos durante una conversación, es un grito de: "Me estoy aburriendo”.

9. Borde de la silla. Este es un claro indicio de estar mental y físicamente incómodo. Es una actitud aprensiva que hará que los que lo rodean se sientan incómodos también.

10. Pies inquietos.
Dar golpes rápido con la punta del pie, además de ser un acto incómodo, indica estrés, ansiedad, impaciencia o aburrimiento.