Hogar y Familia

Ocho claves para tener una familia creativa

La creatividad está influida por la familia, la escuela y otros factores ambientales, según un informe del Hospital Sant Joan de Déu de España, coordinado por el catedrático de Filosofía, José Antonio Marina, director de la Universidad de Padres, UP.

20 de enero de 2015

Para Marina, cualquier persona puede ser creativa si se trabaja y potencia esta aptitud desde la infancia, ya que “la creatividad se puede entrenar mediante técnicas especializadas, fomentando un desarrollo saludable de los niños que contribuirá a formar adultos no solo creativos, sino adaptativos a la flexibilidad e innovación que caracteriza nuestra sociedad".

Es por esto que finanzaspersonales.co le trae las ocho recomendaciones que el experto le resumió a AméricaEconomía.

¿Qué puede hacer desde casa?


Acepte que el niño pueda cuestionar. Para ser un padre creativo, en vez de ser impositivo, hay que intentar ver las cosas desde otros puntos de vista, aceptar otras opiniones, estar abiertos, buscar siempre cosas nuevas o hacerlas de otra manera, aceptar el error, no tener miedo a equivocarse, intentar reducir las críticas y aumentar los comentarios positivos, según Lorente.

Conozca los talentos de su hijo y refuércelos.
Si a papá le encantaría que Pedrito fuese futbolista, pero Pedrito prefiere aporrear todo lo que pilla a modo batería y además tiene ritmo, será mejor potenciarle esa faceta, aunque sin agobiar a los niños con actividades y cursos, porque esto puede generar jóvenes frustrados y aburridos, sino procurando que desarrolle su creatividad y se divierta, destaca la experta de la UP.

Fomente el juego libre, imaginativo, no estructurado.
Está muy bien que los padres pasen tiempo jugando con sus hijos, participando en los juegos como un niño más, sin organizar el tiempo ni la actividad e, incluso, es bueno que los niños se aburran, para que sean ellos mismos quienes deciden a qué jugar, lo que potencia su autonomía, motivación intrínseca, creatividad e imaginación, de acuerdo a Lorente.

Exponga a los niños a la música y al arte.
Contemplar cuadros y escuchar música con ellos desde edades tempranas es una buena forma de pasar tiempo juntos, al igual que compartir teatros, conciertos familiares, grupos de rock para niños o visitas a museos, como los de ciencia, que son muy interactivos, y garantizan un buen rato en familia, además de estimular la curiosidad infantil, sugiere Lorente.

Realice actividades creativas en familia.
Organizar una fiesta, cocinar con los niños, preparar un regalo para otra persona con manualidades o animarles a que se inventen sus propias historias, son buenas opciones, según la investigadora de la UP, que aconseja a los padres jugar, dejarse llevar, divertirse, permitir que la imaginación asuma el poder y volver a ser un niño.

Transmita valores a sus hijos.
Para Lorente es más importante enfatizar los valores morales que las normas, fomentar un sentido moral más que unas reglas concretas, como señala la estudiosa de la creatividad Teresa Amabile, quien afirma que hay que tratar de dar a los niños grandes dosis de libertad y autonomía, respetar sus diferencias individuales, ser cercanos emocionalmente, valorar los logros y ser unos padres activos e independientes.

Cree espacios agradables y estimulantes.
"Los hogares creativos presentan una serie de características que confieren un ambiente inspirador a cualquier rincón, por ejemplo, se puede crear una zona de la creatividad, dedicar un espacio de la casa a colgar dibujos o permitir a los niños tomar alguna decisión sobre la decoración de su cuarto, aconseja Lorente.

Cultive el sentido del humor y cambie sus propias creencias.
Olvide el yo no sé (dibujar, bailar) e inténtelo. Hacer algo original y creativo es un fin en sí mismo, sin pensar en resultados. Lo importante es disfrutar, y más si se hace en familia. Siéntase orgulloso de cosas que haya creado, desee un respiro de obligaciones, metas y propósitos y recuerde que el ánimo relajado favorece la creatividad, recomienda esta experta.