Home

Crédito

Artículo

Banca

Cinco preguntas básicas para manejar sus tarjetas de crédito

El dinero plástico le facilita el pago de su consumo en cualquier lugar del mundo. Es una de las soluciones a sus problemas económicos y una forma de financiar aquello que quiere si no tiene dinero en el momento.

8 de julio de 2014

Las tarjetas hoy son un medio de pago y financiación esencial. Se consideran un crédito rotativo que aumenta su poder adquisitivo; gracias a este plástico, rápido y fácil de usar, usted puede hacer compras en cualquier establecimiento comercial nacional e internacional.

Sin embargo es necesario que se informe antes de utilizar esta “varita mágica”; no sea que usted termine sobrepasando su límite de endeudamiento y que su tarjeta le termine pesando como un piano de cola en la espalda.

FP consultó varias fuentes de diferentes bancos en Colombia para resolver algunas de las preguntas frecuentes que tienen los usuarios respecto de las tarjetas de crédito.

1. ¿Cómo puede solicitar una tarjeta de crédito?

La mayoría de los bancos exigen unas condiciones básicas para entregar una tarjeta de crédito al usuario. Lo primero es que sea mayor de edad y tenga ingresos de al menos un salario mínimo legal vigente (que actualmente se encuentra en $616.000). Si usted cumple estos dos requisitos, dedíquese entonces a reunir la documentación requerida por cada banco, tales como la fotocopia de la cédula, un certificado de ingresos y los extractos bancarios, entre otros.

Una vez usted entrega los papeles requeridos, la entidad financiera realizará un estudio de crédito, para confirmar sus ingresos y su historial crediticio. No se angustie, esto tomará alrededor de cinco días hábiles y si le dan respuesta afirmativa, usted podrá disfrutar de un cupo preestablecido a partir de su capacidad de endeudamiento.

Si usted quiere a toda costa adquirir el producto, pero odia esperar horas en las filas de los bancos y no quiere salir de su casa, usted puede solicitar la tarjeta por internet. Si es aprobada, el plástico le llegará a su casa.

2. ¿Cuáles son las comisiones de las tarjetas de crédito?

Estas varían según lo establecido por cada banco. FP le da a conocer algunas.

• Cuota de manejo: es una cantidad de dinero que usted debe cancelar mensual o trimestralmente, por la utilización del producto. Este monto varía de acuerdo al tipo de su tarjeta. Por ejemplo en Bancolombia por una Master Joven se pagan $23.000 trimestrales, pero si usted es un alto ejecutivo que porta una Amex Oro, debe pagar $74.900 por trimestre.

• Interés corriente: es el valor correspondiente a la tasa de interés, que fija el banco sobre el valor de la compra que usted realice. Si su tarjeta es del Citibank, la cuota, hasta junio 30 de 2014 es de 2,17% mes vencido. En los otros bancos la tasa está alrededor del mismo porcentaje.

• Interés de mora: se hace efectivo cuando usted se ha dejado colgar con el pago mensual reglamentario. Si no cumple en la fecha límite, tendrá que pagar más en la del mes siguiente y así sucesivamente.

• Comisión por avances: es una oportunidad que se le da al usuario, para obtener dinero en efectivo con el fin de sacarlo de apuros o tapar otro hueco. Úsela solo cuando sea necesario, pues es una forma costosa de obtener plata. Para que tenga una idea, en Davivienda, la comisión por un avance en oficina es de $7.700.

• Comisión por presentar la solicitud:
es la que algunos bancos cobran simplemente por realizar el estudio de crédito antes de entregar la tarjeta.

• Pagos por reexpedición de la tarjeta: es la que algunas entidades le cobran para darle un nuevo plástico, ya sea por pérdida o robo por ejemplo.

3. ¿Cómo se puede aumentar o disminuir el cupo?

Si lo que usted quiere es ampliar el cupo de consumo, porque quiere comprar mucho más, debe presentar su solicitud al banco, en este sentido. El requisito principal es demostrar la capacidad de endeudamiento, y si la entidad comprueba que usted puede pagar, será fácil adquirir un límite más alto. Según cada entidad, requiere el envío de algunos documentos. Estudiado su caso, este podrá ser aprobado o negado. Por eso es tan importante que usted tenga siempre un buen manejo.

Pero si lo que usted desea es disminuir el cupo, porque sabe por ejemplo que no se puede controlar en sus compras y ocupa constantemente el tope máximo, debe pedir al banco una disminución del mismo, para evitar tentaciones. Este procedimiento es muy sencillo, en la mayoría de los casos usted simplemente debe llamar a la entidad para que atiendan su solicitud; no requiere documentación.

4. ¿Cómo se puede cancelar una tarjeta de crédito?

Si por ejemplo ya se cansó de estar endeudado todo el tiempo y se le ha salido de control el poder del dinero, o simplemente ya no desea más el dinero plástico, para deshacerse de este, debe asegurarse, primero que todo, de estar al día con el pago del saldo pendiente y de los intereses totales.

Después, depende del banco el procedimiento a seguir. Por ejemplo, en Davivienda, debe redactar una nota y entregarla personalmente a la entidad; en otros casos, tan solo con llamar y solicitar la cancelación se surte el trámite. Sin embargo, siempre le van a solicitar la devolución del plástico para que sea destruido y se complete el proceso de anulación.

5. ¿Cómo se puede renovar la tarjeta de crédito?

La vigencia de las tarjetas de crédito generalmente es de 4 años y su renovación es automática al llegar a su vencimiento, salvo declaración expresa del titular en sentido contrario para no renovarla. Por lo general su nuevo plástico le llegará a su casa, así que usted no tiene que preocuparse por nada.

Tenga en cuenta que si usted hace la renovación anticipada de su tarjeta de crédito en algunas entidades deberá pagar por este servicio, como es el caso Bancolombia, que cobra por este servicio $19.350.

FP le recomienda consultar la página web de cada entidad financiera par cualquier información adicional que usted requiera.

En todo caso, su tarjeta de crédito Oro o Platino, solo por nombrar algunas, lo esperan para disfrutar a sus anchas. Pero, eso sí no se emocione mucho, sea razonable. El exceso de deuda es perjudicial para el bolsillo y a mediano y largo plazo, para la calidad de su vida y la de su familia.