El concepto de ciudad inteligente debe ir más allá del hecho de la aplicación de las últimas innovaciones tecnológicas. | Foto: BBC Mundo

Consumo Inteligente

¿Qué debe tener una Smart City?

El concepto de Smart City debe plantear una visión transformadora, holística e integral de la ciudad, centrándose en el ciudadano como objetivo final y agente impulsor de esta transformación.

15 de noviembre de 2013

Últimamente de utiliza con frecuencia el término Smart City, principalmente dos razones, la primera, porque este término es ampliamente utilizado para nombrar la transformación actual a la cual las ciudades se enfrentan. Como algunos actores dentro de este mercado ya vienen apuntando, las ciudades siempre han estado tratando de ser más inteligente desde el principio de su existencia. Deberíamos preguntarles a los etruscos, que gobernaron el Imperio Romano en el siglo VI AC, si fue inteligente la introducción de la red de alcantarillado en la urbs romana.

Otra, porque aunque por Smart City también se entiende el proceso de introducción de la tecnología en las ciudades, erróneamente se tiende a llamar ciudad inteligente a cualquier ciudad que promueva iniciativas de mejora a través del despliegue de nuevas tecnologías.
Sin embargo, el concepto de ciudad inteligente debe ir más allá del hecho de la aplicación de las últimas innovaciones tecnológicas para una ciudad, sus procesos y servicios, y más allá del hecho de dar un nombre elegante a la enésima transformación del espacio urbano.

“El concepto de Smart City debe plantear una visión transformadora, holística e integral de la ciudad, centrándose en el ciudadano como objetivo final y agente impulsor de esta transformación; y hablando de transparencia, participación, eficacia, eficiencia, agilidad, reducción de costes, integración, cooperación, sostenibilidad y sistema de sistemas.” Rubén Cánovas, consultor senior de Smart Cities de everismart .

Por esta razón, la ciudad debe ser:
- Eficiente, comprometida, competitiva y sostenible en sus ámbitos económico, social y medio ambiental.
- Participativa, abierta, transparente y responsable de su gestión y de sus relaciones con todos los agentes sociales.
- Innovadora, capaz de repensar los modelos tradicionales de prestación de servicios y las estructuras de ciudad.
- Digital e interconectada, utilizar las nuevas tecnologías como herramientas para avanzar en su desarrollo, las TIC no como un fin en sí mismo, sino como un medio para un fin.
- Orientada a la mejora continúa de sus parámetros de sostenibilidad, eficiencia y bienestar.

Para identificar las claves de esta transformación vamos a separar las claves en los principales agentes implicados en esta transformación:

- El ciudadano tiene que ser el centro de todos los enfoques (público o privado) de ciudad, y debe adoptar una triple función: generador de demanda, consumidor de servicios y, en algunos casos, proveedor de soluciones.

- Las administraciones deben promover y facilitar la transformación de las ciudades con la promoción de políticas públicas y regulaciones con el Smart en mente. Además, se tienen que cubrir todos los actores que influyen en dicha transformación.

- Las empresas tienen que centrarse en la promoción del talento y en la economía basada en el conocimiento como uno de los activos fundamentales para el crecimiento económico, traccionando las empresas locales y los pequeños negocios.

Otra clave más global es que el marco general de las Smart Cities debe distinguirse para cada ciudad, de acuerdo a sus capacidades y activos así como a su grado de evolución. Por esta razón, no existe un modelo único de Smart City, hay tantos modelos como ciudades se deseen transformar.

Pero con un objetivo final y principal, incrementar los niveles de bienestar de la ciudad para ser capaces de responder a las necesidades y problemas de los ciudadanos.



*Escrito por Rubén Cánovas, experto en el tema de la consultora everis.