Archivo particular

Emprendimiento

¿Cuál ha sido la clave de éxito para el crecimiento de La Chorizería?

Lo que empezó con una parilla, cuatro chorizos y un puesto de 2x2 metros es hoy un restaurante de toda una esquina en Bogotá, con sedes en Flandes y en las cercanías de Barranquilla.

16 de junio de 2017

“Emprender es duro” “Trabajar en su propio negocio es una actividad de todo el tiempo” “Se necesita mucha pasión”, estas frases son las que comúnmente se escuchan de muchos emprendedores que con éxito han salido adelante con sus negocios. En el caso de Fernando Montaño y Carlos González, dos de los cinco socios que tiene el restaurante La Chorizería, las mismas oraciones no solo se repiten, sino que cobran un significado diferente al recordar las experiencias que los han formado para salir adelante con este emprendimiento, que empezó hace unos 9 años.

En una esquina de la calle 63 #36-40, contigua al parque de Los Novios en Bogotá, se armó el negocio con una parrilla, carbón, sillas prestadas y cuatro chorizos, donde al comienzo los parrilleros fueron Montaño y González. Pero el mismo éxito del producto, hecho a base de 90% carne magra de cerdo y un 10% de grasa, además de la decoración del lugar y la atención ha sido la clave para crecer. Ahora, con un gigante de alimentos interesado en comprarlos, quieren crecer de manera orgánica. “Si existe un interés en quedarse con nuestro negocio, es porque algo estamos haciendo bien”, afirma González.

Hoy son tres restaurantes: el de Bogotá, uno en Flandes (Tolima) y otro en Playa Mendoza (Atlántico) estos dos últimos debido a un ingrediente especial. Para Montaño, los dos puntos fuera de Bogotá están dirigidos a los paracaidistas que se reúnen allá para volar y cuando tocan tierra firme, terminan agitados y con hambre. “Hemos desarrollado allá un sánduche especial que está hecho de albóndigas y pronto lo tendremos en nuestro menú en los demás locales”, indica Montaño, un ex empleado de compañías como Phillip Morris y Telmex que un día tomó el camino del emprendimiento.

Hace más de 20 años él se quedó sin empleo y fue cuando incursionó en el sector de alimentos con la creación de la fábrica Frutos de El Carmen, cuya especialidad son los jalapeños y pepinillos para reconocidos comercios de la capital. La Chorizería fue tomando forma cuando se juntaron los amigos y familiares que se convertirían en socios, donde Montaño les mostró su interés por incursionar con este tradicional producto. “El chorizo que preparan en muchas partes es más grasa que carne. Acá lo hacemos con más carne porque queremos que la gente disfrute de un producto de calidad”, añade Montaño, quien recuerda que todo empezó con un capital de $5 millones, es decir, cada socio puso de a $1 millón iniciales.

Siga leyendo Cómo saber si ya está listo para emprender

Nunca han parado y siempre han reunido experiencias. El único cierre que recuerdan duró algunas horas. Ese día, hace algunos años, había un parrillero nuevo que no tuvo cuidado con las llamas y estas incendiaron la parrilla y la tela de la carpa. El humo y el conato de incendio fue apagado rápidamente por la ‘lluvia’ de extintores que llegaron, gracias a que al lado funcionaba un lavadero de carros.

“Empezamos porque sabíamos que la gente que tenía que lavar el carro podía antojarse de un chorizo, después fue al contrario, la gente venía por el chorizo y aprovechaba para lavar el carro. Cuando el lavadero cerró, nosotros tomamos el sitio completo en arriendo y seguimos creciendo”, agrega González.

La meta: abrir franquicias

Montaño dice que están trabajando en vender franquicias y que ya tienen sobre la mesa unas 70 personas interesadas en tener el ‘know-how’ y la calidad de los productos de La Chorizería.Pero eso tomará un tiempo porque están determinando el manejo, el flujo de costos y el precio que tendría la venta de este modelo de negocio. Por ahora, la idea es trabajar con ahínco todos los días. “Una señora tiene un local de 560 metros cuadrados para arrancar en Bogotá”, reveló Montaño.  

Y es que como ellos comentan, hasta ahora están empezando a obtener ganancias de su trabajo porque los primeros ocho años fueron enfocados en reinventir los ingresos. También tienen un componente social ya que reclutan como meseros a jóvenes que no tienen experiencia en el campo. “Acá apoyamos la cultura del primer empleo y por eso le decimos a nuestros clientes que nos tengan paciencia porque son muchachos y muchachas que están empezando”, recuerda Montaño.

Le puede interesar Respondiendo a la pregunta por qué quiero emprender

La empresa vende hoy 12.000 chorizos y 4.500 hamburguesas mensuales en promedio. Su carta la componen 14 chorizos propios y 10 hamburguesas, pero van por más. Aunque el restaurante goza de un gran espacio, muchos clientes optan por los domicilios, que por cierto son de gran ayuda cuando llega la media noche y pocos establecimientos se encuentran sin servicio. Y todo a cargo de 40 personas que trabajan en la empresa.

Claves para crecer en el sector

Para González y Montaño, el secreto para crecer y que el negocio prospere se puede resumir en estas claves:

-Lo principal es empezar y tener paciencia en el emprendimiento. El éxito no llega de la noche a la mañana sino es la suma de muchos esfuerzos y sacrificios.

-De allí se deriva que no hay que perder la cabeza. En el caso de ellos todo lo han logrado sin acudir a los bancos y no han tenido que hacer préstamos para crecer. Más que todo han esperado a que la empresa arroje sus resultados para poder reinvertirlos allí mismo.

-La calidad del producto es primordial. En el sector de comidas no se puede bajar costos trayendo ingredientes más baratos. Eso hay que mantenerlo porque sino, el cliente sentirá que fue engañado. Ellos lo han logrado manteniendo el control en la producción.

-Hay que crear expectativa. Una de las cosas que recuerdan los fundadores es que al comienzo pusieron letreros y pancartas anunciando la apertura del restaurante. Pero no pusieron una fecha ni nada por el estilo. Esperaron por tres meses y cuando llegó el día la gente que tenía la expectativa llegó al lugar y así comenzó a crecer.

Si le gustó, le sugerimos leer Lecciones de Albert Einstein para emprender