Los resultados de negocios en familia tienen indicadores negativos en todo el mundo. | Foto: Archivo Semana.

Negocios

Cómo no fracasar en una empresa familiar

El 70% de las empresas familiares no pasan de la primera a la segunda generación; del 30% que sí lo hace solamente 15% logra pasar a la tercera generación.

7 de noviembre de 2012

Raúl Serebrenik, experto y asesor de patrimonios y legados familiares, asegura que la estadística de mortandad en las empresas familiares es terrible no solamente en Colombia, sino en el mundo.

“Matemáticamente de cada 100 empresas solamente tres o cuatro logran ser asumidas por otros miembros de la familia”, asegura el experto. Y añade que así lo demuestran diversos estudios en varios países.

El mayor acierto

Hay tres etapas en la evolución de una empresa: la primera es el emprendimiento, la segunda el cómo crecer y la tercera la consolidación del crecimiento armónico.

Es importante reconocer y entender cuáles son las necesidades particulares de la familia y de la empresa en cada una de las etapas y en la medida de lo posible profesionalizar a los miembros de la familia para que tengan la capacidad de manejar el crecimiento y la consolidación.

“Inclusive si carecen de la capacidad, por lo menos tenerla para darse cuenta que no tienen la capacidad de salir al mercado y de traer a alguien súper profesional que tenga la experiencia necesaria para potencializar la empresa”, señala.

¡Qué desacierto!

Lo peor que puede pasar en una empresa familiar es no tener una visión compartida entre los miembros de la familia y no querer admitirlo. El mayor pecado es querer quedarse en un grupo familiar donde tienen claro que no se van a poner de acuerdo y que patean la bola para adelante para no generar un conflicto que a la larga va a generar un conflicto más grande.

Según Serebrenik, es preferible entender que no se comparte la misma visión y no por eso se puede seguir juntos, sino que es necesario separarse de una forma amigable y entender que no se comparten las mismas metas.

La falta o el poco interés de formarse también es un grave error. Estudios han demostrado que un 90% de las herencias que se reparten desaparecen en un término de 15 años y la principal causa es la falta de preparación para asumir el legado familiar.

Inclusive ese vacío profesional afecta a otras familias, es ahí cuando se convierte en un tema de responsabilidad social porque deja sin empleo a otros.

¿Cómo mantener el legado?

Muchas familias crean una empresa, pero se abstienen de trabajar activamente en ella. Aún así, hay que contar con la formación suficiente para evitar el fracaso del patrimonio.

No necesariamente todos los miembros de la familia deben ser ejecutivos, ni estudiar administración de empresas, se puede ser médico o músico pero eso no quiere decir que no se tengan que involucrar y ayudar a escoger, por ejemplo, al gerente de la empresa.

Las empresas que logran profesionalizar a sus miembros en la gestión empresarial sin importar la vocación o la carrera que hayan escogido tienen una serie de ventajas que se ven reflejadas en indicadores de ganancias.

Estudios demuestran que los propietarios que no trabajan en la empresa, pero que han recibido la formación como propietarios activos, tienen una correlación directa con un mayor crecimiento y mayor rentabilidad.

¿Mejor los amigos o la familia?

“Si le va mejor con la familia hágalo con ellos, si le va mejor con los amigos pues siga con ellos, eso también depende de lo que usted quiera. Si desea una empresa que perdure en el tiempo como unidad familiar pues trabaje con ellos y prepárelos", concluye el experto.