Si desea colgar, hágalo, a veces es la mejor opción para frenar el impulso frenético del personal comercial que lo contacta. | Foto: Sxc

Consumo

Aprenda a ir un paso más adelante de los estafadores

Al contestar una llamada tenga cuidado de no caer en un engaño. Para evitar esto, conozca las recomendaciones dadas por la Superintendencia de Industria y Comercio que le ayudarán a identificar a un estafador.

21 de junio de 2012

Si usted no está dispuesto a comprar los bienes o servicios ofrecidos sienta la plena confianza de decir que no a su interlocutor.

Así mismo, si desea colgar, hágalo, a veces es la mejor opción para frenar el impulso frenético del personal comercial que lo contacta.

De acuerdo con la Superintendencia de Industria y Comercio, tenga cuidado cuando:

-Lo halagan: Lo llamen adulándolo, alagándolo por ser cumplido en sus pagos y tener excelentes referencias financieras y/o comerciales.

-Se burlan: Usted rebate el precio y el interlocutor le increpa de manera burlesca, queriendo hacerlo sentir inferior si no se cree capaz de cubrir el precio.

-Falsos funcionarios: El interlocutor se presenta como funcionario bancario. Recuerde que los bancos nunca llaman a solicitar datos, ya que este procedimiento lo realizan personalmente en sus oficinas, nunca vía telefónica.

-Premios que no existen: Le expresen de manera directa o simplemente quieran hacerle creer que usted se ganó algún premio por su buen comportamiento financiero o como ciudadano (no tener partes, infracciones, estar al día en impuestos, ser altruista etc…).

-Condiciones: Se condicione la entrega de un premio ofrecido, a la compra de algún bien o servicio.

-Incentivos: El interlocutor utiliza información de su profesión u oficio para ofrecerle premios o incentivos.

-Mentiras sobre nueva ley: Afirmen que el servicio que ofrecen será una obligación legal (por ejemplo: un seguro de estudio, tránsito, jurídico o médico), que la Ley se encuentra en trámite y que el precio que le ofrecen es reducido debido a su pre-lanzamiento.

-Servicio: Le digan que el aporte que usted realizará es mínimo porque su compañía financiera o la empresa de la cual lo llaman está asumiendo un alto porcentaje del valor del servicio.

-Cliente preferencial: Le expresen que por usted ser un cliente exclusivo o preferencial, tiene a su favor un determinado número de bonos y que por tanto le van a subsidiar un porcentaje del valor del servicio o producto que le ofrecen.

-Averiguen datos personales: Le insinúen o pretendan mostrarle que poseen su información financiera, y sin embargo, le solicitan que mencione los números de su tarjeta, la fecha de vencimiento, las claves o cualquier otro dato, con la excusa de validar que usted es el titular de la tarjeta.

-Acoso: Lo presionen a realizar la compra debido a que percibe que sus circunstancias en el momento de la llamada no le permiten tomar decisiones.

-Ofrezcan precios bajos: Le informen repetidamente el valor de la cuota a pagar, ya que con esto buscan que usted perciba un precio más bajo del que realmente pagará por el bien o servicio.

-Presión: Lo fuercen a tomar la decisión de inmediato y no le permitan pensar o analizar una propuesta de negocio.

-¡Viejos amigos!: El interlocutor le habla de manera muy familiar, como queriendo obtener su confianza de manera rápida, para facilitar el acceso a su información.

-Ejemplos de otros clientes: Le informen que muchos otros clientes de su banco han adquirido el servicio y no tienen ninguna queja al respecto y se encuentran felices con él.

-No hay referencia: Le ofrezcan un producto con determinadas características, pero no otorguen información acerca de la referencia específica de dicho bien.

-No lo dejan consultar con otra persona: Le señalen que no debería consultar la decisión que va a tomar con su pareja, puesto que es una oportunidad que no debería dejar pasar, porque la oferta es por tiempo limitado o porque las unidades disponibles del servicio o producto son escasas…

-Puntos o millas: Le indiquen que tiene puntos o millas por redimir y le pidan que lo haga en ese momento, con el supuesto fin de que dichos puntos o millas hagan parte del pago del producto que le están ofreciendo.

-¿Información de dominio público?: Le soliciten información personal y financiera argumentando que no es privada sino de dominio público.

-No le dejan escoger: El interlocutor imponga un número de cuotas y no le permita a usted escogerlo.

-Ausencia de datos: No otorguen información precisa de la razón social de la compañía de la cual lo llaman.

-No hay más oportunidades: Se nieguen a repetir la llamada en otro momento, argumentando próximos vencimientos de promociones que le están ofreciendo.

-No importa el precio: Resten importancia al precio dando por obvio que su poder adquisitivo es más que suficiente para cubrirlo.

-No existe la empresa: El interlocutor le exprese que es de alguna empresa reconocida pública o privada, pero no hay exactitud al informar cual.

-Saben de usted: Sin que usted informe, el interlocutor sepa que posee tarjetas de crédito o algún vínculo específico con determinadas entidades financieras.

-Le hacen creer que es obligatorio: Le quieran hacer creer que es obligatorio recibir lo que le ofrecen so pena de multas futuras o aumentos considerables en el precio.