Las celebraciones en el año que más afectan su bolsillo

Hasta hace algunos años, tal vez bastantes, en el calendario anual de celebraciones se encontraban el día de la madre y el día del padre con un especial significado para nuestra sociedad.  A pesar de no haber desaparecido, su importancia ha ido decreciendo en la misma medida en que hacen parte de una larga lista de celebraciones que, año tras año, se hace más larga gracias a la importancia mediática que se les da y al aprovechamiento que hacen las marcas para incrementar el consumo por los días de cada celebración.

Lo que antes solo era celebración de mayo y junio se ha convertido en celebración permanente, mes a mes. Y, ¿esto qué tiene que ver con nuestras finanzas? Diría que mucho. Nos han metido tanto en la dinámica de las celebraciones que, si hacemos una valoración de los gastos que son ocasionados en esas fechas, podríamos llevarnos una gran sorpresa, sorpresa que atenta definitivamente contra nuestros bolsillos.

Le tenemos Las 4 razones por las cuales no se detiene la caída del bitcóin

De todos los meses del año, son muy pocos los que se escapan a las celebraciones, el primero de ellos es enero, mes en el cual las familias destinan gran parte de sus ingresos a la atención de los gastos escolares y por ello no es muy posible que se pueda generar una distracción financiera, es un mes de profundo foco financiero.

Pero, arranca febrero y empieza la andanada de celebraciones, en este caso con una tradición importada pero que empieza a calar entre nuestra sociedad: el San Valentín, nada más norteamericano que dicha celebración. La globalización trae como consecuencia eso, el traspaso de las tradiciones de un lugar a otro, de un país a otro. Empresas turísticas, restaurantes, floristerías y tiendas por internet, entre otros establecimientos, aprovechan esta ocasión como una oportunidad más para el incremento de sus ventas, mucho más cuando después de enero estas se ven considerablemente abajo.

Llega marzo y, con él, la andanada de celebraciones. El 8 es el día de la mujer, en aras de la equidad el 19 es el día del hombre y, por si fuera poco, el 12 es el día de los amigos (campaña liderada por una importante marca de cervezas que va un poco más allá: habla del mes de los amigos). Cada una de ellas, con el paso de los años, se ha ido convirtiendo en un motivo (para muchos en una obligación) para regalar, endulzar o por lo menos felicitar a todos quienes de una u otra manera comparten con nosotros en el día a día.

Abril no se podía quedar atrás, el día del niño, el 23 de este mes. Esta celebración ya goza de gran arraigo en nuestra cultura, tanto así que desde finales del mes anterior ya empieza la invasión publicitaria de ropa y juguetes para los infantes, induciendo al festejo y la compra del respectivo regalo para nuestros niños. En este mes también se celebra el día de la secretaría, tal vez más de carácter empresarial, pero no menos importante para el gasto, el agasajo y la celebración.

Siga leyendo: Cómo no perder el tiempo en su asamblea del conjunto

Luego vienen mayo y junio, madre y padre, uno tras de otro, compromisos ineludibles que además de regalo incluye el correspondiente almuerzo familiar. Dada la impactante acogida de este día, al igual que con otras celebraciones, también se habla del mes de la madre y del mes del padre, alargando las posibilidades de compra y agasajo a más fines de semana que el previamente establecido.

Julio parece pasar incólume, pero agosto ya no lo está. Desde el año pasado, a pesar de que por decreto existe desde 1990, ya se dieron los primeros pinitos para la institucionalización del día del abuelo el último fin de semana de este mes, aún no se ha consolidado, apenas fue la iniciativa de algunos colegios que ya lo incluyen en el calendario de sus actividades, sin embargo, muy seguramente estamos frente al inicio de un nuevo compromiso para nuestro bolsillo.

Y entra septiembre, como si no hubiese sido suficiente con el San Valentín, ahora sí el nuestro, el día de los novios o de Amor y Amistad, regalo, rumba y otros gastos se suman en este mes tan importante para nuestros sentimientos, no para el bolsillo.

Octubre trae consigo su propio gasto, el Halloween, otro día de los niños en nuestra versión criolla, y aun cuando en este caso no estamos hablando de regalos, el gasto si está en la compra de los disfraces, antes solo para los niños que querían recoger algunos dulces en las noches, golpeando en la puerta de la casa de los vecinos. Hoy es una fiesta mucho más importante, además de la compra o alquiler del disfraz para niños y adultos (prohibido repetirlo de un año a otro) sume la o las fiestas a las cuales tendrá que ir para poder lucirlo.

Noviembre es un relax. Pero prepárese que ya llega diciembre y en ese momento el bolsillo se acaba de reventar.

Ofrezco excusas si olvidé alguna celebración, son tantas que el inventario muchas veces se puede quedar corto, mucho más si en los próximos años se subsana esa injusticia social de no reconocer el día del tío, del primo, del cuñado, del concuñado, del vecino, del amante, de la ex, etc…

Si usted es una de las personas que se preocupa por hacer el reconocimiento de cada una de las fechas que existen en el calendario, valórelo en términos financieros, sume y reflexione, muy seguramente es mucho más dinero del que piensa y del que ha podido presupuestar, si es que lo ha hecho.

FP recomienda: Tenga cuidado con las ofertas para comprar carro nuevo

*Administrador de Empresas con Doctorado en Ciencias Empresariales. Consultor en temas financieros y organizacionales, con amplia experiencia en el sector bancario y en el sector servicios. Se ha desempeñado como Decano de la Facultad de Administración, Finanzas y Ciencias Económicas de la Universidad EAN en donde actualmente es Profesor Titular.