La parte que falta para vivir digitalmente

Es indudable el avance que Colombia ha tenido en materia tecnológica en el último tiempo. Desde que se creó el Programa Vive Digital hace tres años: las conexiones a Internet del país han crecido de 2,2 a 7,7 millones y se ha logrado un cubrimiento con fibra óptica del 75% de los municipios. Además se brindó apoyo a 17.000 pymes para que adapten la tecnología en sus diferentes procesos de negocios.

A esta revolución sólo le está faltando un componente: el recurso humano. La llegada de nuevas empresas tecnológicas dispuestas a aprovechar las mejores condiciones del mercado colombiano, el ensanche de corporaciones que han apostado por el país desde hace décadas y el surgimiento de toda una red de emprendimientos nacidos en las denominadas TIC han creado oportunidades laborales que no se están supliendo con suficiencia en el mercado nacional.

No se trata de los cargos técnicos, que tienen que ver con la ingeniería, el desarrollo o la implementación de soluciones. Aquí hay que destacar la capacidad, muchas veces empírica, que han adquirido los colombianos y que se ve reflejada en los más de 35.000 seleccionados por el Ministerio de TIC para hacer parte del programa Apps.co.

La demanda está más arriba, en los perfiles necesitados para que puedan dirigir una empresa, a aportar estratégicamente para el desarrollo de negocios o a ser considerados para el staff directivo de una organización.

Una barrera tan sencilla como el idioma descarta a una buena cantidad de candidatos. Se puede debatir en torno a aspectos sociales, presentación personal y hasta experiencia, pero sin duda la mayor carencia está en la necesidad de perfeccionar las habilidades de pensamiento estratégico.

A la vez, si los buscamos con esas competencias, muy seguramente el conocimiento técnico sobre medios digitales no sea el indicado. Pongamos el ejemplo de un gerente de mercado, son muy pocos los que están en capacidad de dirigir una de las tantas empresas de comercio electrónico que se están asentando en el país. Por eso, la mayoría de ellas está prefiriendo traer candidatos extranjeros y por eso las empresas de reclutamiento que cuentan con redes internacionales de profesionales son las que se están imponiendo. Claro, siempre está la posibilidad de nombrar a alguien que ya viene con la compañía y darle un tiempo para que aprenda el nuevo lenguaje, pero ¿tienen las empresas ese tiempo para esperar?

A nivel de mercado podemos aguardar que las nuevas generaciones, esos nativos digitales de los que tanto se habla, alcancen los entornos más altos en las organizaciones; pero, mientras, es conveniente ir identificando muy bien el talento tecnológico que más rápida y eficientemente pueda llegar a dirigir estratégicamente una compañía, y ese es el papel que hoy puede y debe cumplir una buena consultoría en procesos de selección y búsqueda de candidatos.