Mauricio Monroy. | Foto: Cortesía

Columnista

La inflación y el bolsillo de los colombianos

Como ya se esperaba, la inflación al cierre del año 2013 registró el índice más bajo de los últimos sesenta años ubicándose en 1,94%, pero, ¿Que tiene que ver este acontecimiento con las finanzas personales?

23 de enero de 2014

Tiene todo que ver, porqué según el gobierno, el precio de los bienes de la canasta familiar apenas se incrementará en 1,94%, hecho que favorecerá el bolsillo de todos los colombianos.

Sin embargo, es de esperar que todos los empresarios y comerciantes respeten dicho incremento y no eleven los precios por encima del IPC (Índice de Precios al Consumidor, es decir, la inflación), aunque se supone que esa es una tarea de control por parte del estado.

Recordemos la importancia que tiene para un país manejar una inflación baja, la cual, permite que los precios de los diferentes productos sean bajos también y por ende favorable a las familias, además una inflación controlada permite obtener un crédito hipotecario barato, ya que la tasa real de dicho crédito se calcula con el IPC y la tasa de interés corriente que cobra la entidad bancaria, y por último, los mercados y los inversionistas extranjeros ven con buenos ojos a las economías emergentes como la nuestra, que presentan bajos porcentajes de inflación.

Es importante aprovechar la situación actual que muestra variables macroeconómicas plenamente controladas como lo es la tasa de interés, la tasa de desempleo, el tipo de cambio, en otras palabras, es el momento ideal para fomentar el ahorro, diseñar un plan de crédito e incluso obtener un buen empleo.

Por lo anterior, nuestro Banco de la República ha sido calificado como uno de los mejores bancos centrales de la región, gracias precisamente al excelente desempeño y manejo general de la economía, de hecho, el doctor José Darío Uribe gerente de esa entidad ha sido postulado al premio al mejor banquero central.

Por ahora el Banco de la república sigue pensando que es pertinente mantener la tasa de interés de intervención en 3.25%, teniendo en cuenta que cerró el año 2013 con cifras envidiables por cualquier país y eso que aún se espera un crecimiento del PIB (Producto Interno Bruto) por el orden del 4,3%, a pesar de los diferentes problemas que se presentaron a lo largo del año pasado, como el paro de campesinos, la ola invernal y muchos otros.

Aunque algunos analistas pronostican que de acuerdo con la situación económica mundial, es posible que en los meses venideros se pueda incrementar la tasa de intervención, volviendo más costoso el crédito y provocando nuevamente un dólar con tendencia a la devaluación.


Mauricio Monroy
Docente universitario y empresario
maur539@hotmail.com