Sandra Liliana Miranda Forero, Magistra en Economía y Economista Pontificia Universidad Javeriana. | Foto: Alejandro Acosta

Elecciones

El dilema del prisionero

En la teoría de juegos se emplea un problema denominado “El Dilema del Prisionero”, el cual consiste en analizar un caso hipotético (pero que ocurre en la realidad), en donde dos delincuentes son capturados por haber cometido un crimen, pero no existen pruebas contundentes para poder acusarlos y judicializarlos.

Sandra Liliana Miranda Forero
29 de mayo de 2014

Debido a que ambos son interrogados de manera separada, ninguno sabe con exactitud si el otro confiesa o no y de hecho, es posible que quienes están a cargo del proceso, les hagan creer a ambos que el otro ya hablo y le ofrezcan a cada uno incentivos para tomar la decisión de hablar (rebaja de pena por confesión, protección de testigos, etc.).

Al final del juego se termina demostrando que ambos optan por confesar, dadas sus expectativas de la estrategia de su cómplice, porque piensan que el otro hablará y no hablar si hay una confesión del otro prisionero genera pérdidas significativas. Sin embargo, y dado que en realidad no había pruebas contundentes para poder mantener capturados a ambos por mucho tiempo, la opción de no confesar sería la mejor (“first best”), pero hay incentivos para desviarse a una segunda mejor (“second best”), que es la de confesar.

En el tema de las elecciones políticas y en el caso particular de las elecciones a la Presidencia de la República de Colombia, muchos votantes cambian la estrategia que les parece la mejor opción y que de acuerdo con lo que buscan en un candidato que asuma el cargo de Presidente, para darle su voto a otro candidato con “mayor fuerza” y que pueda hacerle oposición al que no quieren que gane. Por otra parte, la información en muchos casos de las encuestas que reflejan la intención de voto por los diferentes candidatos y que como pudimos constatarlo en la pasada jornada de votaciones del domingo, no siempre coincide con la realidad, también tiene efecto en la decisión final de voto.

Muchos colombianos podrían haber deseado votar en blanco en la primera vuelta (también podrían querer hacerlo para la segunda vuelta); pero es claro que dado que la competencia entre los dos candidatos que pasaron a segunda vuelta es tan concentrada, la mayoría de votos estarán direccionados tanto a Juan Manuel Santos como a Oscar Iván Zuluaga y el voto en blanco será minoría. De hecho el fenómeno de tener una primera y una segunda vuelta es un ejemplo bastante interesante de lo que se considera un juego en dos etapas, en donde los colombianos también podemos cambiar de decisión con base en los resultados observados de la primera vuelta, dejarnos influenciar por el apoyo que posiblemente le den los candidatos que quedaron por fuera de la contienda, a los dos que pasaron a la recta final y los resultados que muestren las encuestas que se den a conocer en las próximas semanas.

Pero a su vez, se hace interesante analizar como los dos candidatos que siguen en la lucha por llegar al poder, están bajo un modelo de competencia en donde existe un duopolio que pretende capturar la mayor parte del mercado de votantes, lo que seguramente nos permitirá observar diferentes estrategias de convicción, publicidad en donde cada uno de los dos, tratará de predecir de la mejor manera la estrategia de su rival. Lo que es claro, es que desafortunadamente en el tema de las elecciones por candidatos políticos, es común el observar como tienden a primar resultados que no son precisamente los mejores u óptimos (es decir, que maximizan el bienestar social), sino los que se consideran sub óptimos, dado que las decisiones se toman con base en información asimétrica, expectativas que pueden ser erradas, efecto arrastre (al tener conocimiento de la intención de voto de los demás) o porque se piensa que la opción que en verdad se quisiera elegir nunca va a ganar. Todo esto, como ocurre en el caso del “Dilema del Prisionero”.

Sandra Liliana Miranda Forero
Magistra en Economía y Economista Pontificia Universidad Javeriana
Profesora Departamento de Economía y Posgrados en Admón. en Salud
Coordinadora de Posgrados
Pontificia Universidad Javeriana