¿Cómo hacer una vaca online?

¿Usted siempre ha sido el o la líder del grupo de amigos? Seguro que le gusta viajar con ellos, que se vean en los cumpleaños o ahora que estamos en navidad, buscar la casa de alguien para hacer la novena. Y todos esos eventos requieren de platica, de “hacer la vaca” para recoger lo que se necesita para que el evento sea exitoso. Eso de estar “pasando el sombrero” puede volverse algo difícil porque el “présteme y más tarde le pago” se vuelve la frase de todos y finalmente, usted termina poniendo el faltante y esperando a que llegue la quincena para que los del grupo pongan la plata.

Precisamente, debido a que recoger la plata para la vaca es una tarea aburrida y ‘jarta’ para los organizadores, una página web quiere volver divertido, fácil y ‘cool’ la labor de buscar la plata. Se trata de www.armatuvaca.com, una idea traída desde Francia y que ha tenido éxito en España e Italia. El que la trajo a Colombia es Pedro Gaviria, quien trabajó con los fundadores franceses de “Le Pot Commun” y que ahora son sus aliados internacionales.

Gaviria no está solo en el país, conforma equipo con Camilo Ruiz (mercadeo) y Pablo Durán (el ‘duro’ de las finanzas) para tratar de cambiar el chip de las personas que quieren hacer vaca para sus planes. “Todo empezó en 2011, cuando tuve la oportunidad de conocer a mis mejores amigos después de hacer una práctica en Francia. Uno de ellos fue el fundador de la página web para hacer vacas online y ese ‘know-how’ que adquirí lo traje a Colombia porque vi que existe un gran potencial, debido a que hay una necesidad”, dice Gaviria, un administrador de empresas de 28 años, graduado de la Universidad de Los Andes. De hecho, una entidad bancaria ya les tiene ‘echado el ojo’ y los está apoyando para el éxito de este emprendimiento.

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Incluso, a inicios de noviembre estuvieron presentes en el Web Summit de Lisboa, un evento de emprendimientos tecnológicos donde se reúnen más de 57.000 personas y poco más de 1.000 ‘start-up’ buscan atraer la atención de inversionistas y aliados internacionales para sus planes de expansión.

¿Cómo funciona?

El proceso es lo más sencillo que se pueda imaginar. El organizador de la vaca se registra a través de un formulario, por Facebook o con correo electrónico. Personaliza la vaca, con tema, nombre del evento, lugar y todo lo demás que quiera poner. La ‘fotico’ es clave para que más personas se animen. Después invita a los participantes y les dice cuánto es el valor de la vaca, que puede ser fijo o variable. Además, acepta los pagos por medio de cualquier tipo de franquicia de tarjeta de crédito y próximamente estará disponible el servicio de pagos débito a través del botón PSE. Por eso, solo permite el ingreso de personas que cuenten con un producto financiero (es decir, las bancarizadas) y sean mayores de edad. El sistema no es para hacer abonos en efectivo, mucho menos en especie.

Cuando se aproxima la fecha del evento, el administrador del dinero recibirá la plata a la cuenta de ahorros o corriente de su elección. Además el sistema ayuda a gestionar los participantes y envía recordatorios para los que no han pagado, o agradecimientos a los que lo hicieron. Y listo, el que pagó, participa y el que no pagó, muy mal, pero igual, será tenido en cuenta para la próxima.

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Si no le quedó tan claro, se lo explicamos con el siguiente video:

Claro, para que la página se sostenga hay que pagar entre $2.000 y $7.000 dependiendo del monto que se está pidiendo para el evento y la cantidad de participantes. Para explicarlo más fácil: si usted es parte de una vaca de $100.000 y su cuota es de $20.000, se le cobrarán $22.000 que irán así: $20.000 para el organizador y $2.000 para la página, que es la tarifa por usar el servicio. Pero si van a hacer un paseo a Santa Marta y la cuota de  los 10 amigos es de $400.000, a cada cabeza se le pedirán $407.000, de los cuales $7.000 son para la página.

Y ahora la clase

Gaviria sabe que para emprender se deben superar varios obstáculos. Uno de los que tiene en Colombia es el acceso de las personas a productos financieros, más cuando reformas como la tributaria le ponen un freno a la bancarización. Pero está convencido de poder lograrlo, tal como ya pasó en Europa. Además, quiere dejarle unas lecciones a los emprendedores colombianos que quieran seguir por este camino:

-Aprender a superar las barreras: Las dificultades del camino hay que saber sobrepasarlas. Seguramente, después de superar la primera, vendrá una más después y luego aparecerá otra más difícil. Esos retos hay que superarlos y aprender de todos ellos.

-Creer en uno mismo: Es un reto más difícil que el anterior. Muchas veces los emprendedores empiezan a dudar, sobre todo en los momentos complejos. Pero cuando entra en confianza y creen en su idea y en que pueden avanzar en su objetivo, llegan recompensas porque los demás también empiezan a creer. Es un efecto ‘bola de nieve’ de confianza, pero que no hay que confundir con el exceso y la soberbia.

-Rodearse bien: Muchas veces el emprendedor piensa que por empezar solo, todo lo puede hacer por sí mismo. Pero es un error, hay que buscar las personas correctas que aumentan las probabilidades de éxito. No siempre están cerca, hay que salir a buscarlas.

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