¿Es conveniente ahorrar en una "cadena" ?

Un jueves en la tarde llega Paula, una joven de 23 años, donde Lucia su mamá,  a decirle que se meta a una “cadena” con la familia de su novio. Ella le propone que mensualmente, en un grupo de 20 personas, se entregue una cuota de $100.000. La señora, que por cierto tiene varias deudas, decide aceptar con la esperanza de que ese ahorro a futuro le pueda ayudar a salir de varias “culebras”. ¿Le funcionará?

Según el estudio Road Trip Latam 16, en el que se consultaron 10.000 hogares de las principales ciudades de Latinoamérica. En ahorro, los colombianos disminuyeron el porcentaje que piensan ahorrar al pasar de 87% a 83% entre el año pasado y este. Es de resaltar que la intención de ahorro es más fuerte en los estratos  bajos, 86%, frente a los  altos con 71%, lo que indica que los hogares de estratos 1 y 2, están pensando y programándose mejor para el futuro en materia de ahorro.

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Sin embargo, las maneras de ahorro que escogen muchas de las familias colombianas no son las más adecuadas pues, como en varios artículos que se han hecho en este portal,  se optan por las típicas alternativas: las alcancías o guardar la plata bajo el colchón. Que si bien no están del todo mal, porque al fin y al cabo es ahorro, no son las más adecuadas. Y si usted también las hace, trate de que ese dinero sea para una inversión a corto plazo.

Otro de los mecanismos de ahorro más usado por las personas son las famosas “cadenas” en el cual un grupo de familiares, amigos o compañeros de trabajo crean un sistema de ahorro que generalmente es mensual, pero también puede ser semanal o quincenal según los deseos de las personas. Los integrantes definen, primero, el monto a ahorrar; segundo, la periodicidad; y tercero, las fechas en las que se entregará el dinero. El número de veces que se recauda dinero en una cadena es igual al número de personas que están participando. El grupo acuerda al inicio en qué fecha le tocará recibir el dinero a cada integrante.

En el caso de Paula y Lucía, por ejemplo, si la cadena recoge $100.000, es mensual y cuenta con 20 participantes, ésta durará 20 meses, es decir, recogerá dinero 20 veces. Cada mes un integrante del grupo recibirá la totalidad de dinero recaudado, que según este caso serían $2’000.000. La cadena terminará una vez todos los integrantes hayan recibido su dinero. 

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¿Entonces, es bueno o es malo?

De acuerdo con Rodrigo Nadal, gerente la entidad ‘Resuelve tu Deuda Colombia’, este  es un método de ahorro informal y de alto riesgo porque no depende de nosotros que los demás cumplan y si el dinero no se logra recoger o el organizador desaparece, el capital se perderá.  Además enumera las siguientes desventajas:

1. Este es uno de los métodos más riesgosos del mercado porque estamos sujetos a la seriedad y compromiso de los participantes de la cadena. Aunque exista una relación estrecha entre los integrantes, incluso si son familia, existe la posibilidad de que incumplan en los pagos y por lo tanto el dinero de todos los demás esté en riesgo; o que la persona encargada de la cadena los deje sin nada.
2. Como el dinero queda quieto y no genera rentabilidad, pierde su valor adquisitivo.
3. Debido a que la organización de cadenas es informal y no existe una regulación, no es posible presentar reclamos formales en caso de pérdida de dinero.
4. Como el dinero no ingresa al sistema financiero, no aporta información positiva al historial crediticio.

El hecho de que los colombianos sigan entrando a estos mecanismos de ahorro se debe en gran parte por la desconfianza y falta de información de los productos y servicios bancarios, por lo cual este sector debe seguir trabajando para que se trabaje en beneficios de las finanzas personales de los ciudadanos.

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Consejos para aplicar si ya ingrese a una cadena.

Según el experto, si ya entró a una cadena y no hay vuelta atrás, lo importante es que una vez reciba el dinero que le corresponde, lo invierta en instrumentos formales que permitan generar una rentabilidad, por lo menos igual a la inflación, para evitar la pérdida del valor adquisitivo.

Ahora, si encuentra una acumulación de deudas que no ha podido cancelar, tal vez la mejor forma de usar el ahorro obtenido en la cadena será en el pago o abono de sus obligaciones actuales. Esto a futuro le brindará tranquilidad porque no tendrá que preocuparse por esas deudas, dejará de acumular intereses y le representará un mayor flujo de efectivo al mes, el cual podría destinar al ahorro formal o la inversión. Una forma de priorizar el pago, es empezar por las deudas de menor cuantía.